UN GRUPO DE RURALISTAS CONFIRMA EL TRACTORAZO.
Protesta del campo en la Capital.
La Comisión de Enlace no logra alinear a un grupo numeroso de productores autoconvocados que, contra viento y marea, organiza una nueva protesta y promete llevar 1000 tractores al Obelisco el 6 de noviembre. El secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, que en su propio despacho les ofreció subsidios y créditos del Banco Nación, tampoco lo logró.
Menos informal, el ministro de Agricultura, Julián Domínguez, no deja de enviar señales de diálogo y hasta caminó junto a los chacareros de General Villegas que peregrinan a Luján para pedir "paz para el campo". Los autoconvocados no creen que el nuevo ministro pueda cambiar la política agropecuaria que, entienden ellos, se define en otros despachos. Ni las profecías más oscuras de la líder de la Coalición Cívica (CC), Elisa Carrió, amedrentan a estos productores que siguen referenciándose en el liderazgo del combativo ruralista entrerriano Alfredo De Ángeli.
Ayer, Carrió les pidió a los ruralistas que no vengan a la Capital Federal y se manifiesten en sus pueblos. "[Néstor] Kirchner busca armar una revolución delirante entre la oligarquía y el pueblo", dijo.
Una fuente de la Sociedad Rural, que prefirió no identificarse, reconoció que "si no aparecen las soluciones, el tractorazo es lo más probable". En las otras entidades prefirieron no opinar sobre la movilización, que hasta ahora, en medio de la negociación con Domínguez, intentaron postergar. "No podemos aparecer frenando esto", se confesó un ruralista.
La Comisión de Enlace volverá a reunirse hoy para analizar su posición frente al tractorazo y ante la reunión que los técnicos del campo mantendrán mañana con sus pares del Ministerio de Agricultura. De ese encuentro deberían surgir novedades concretas sobre la reglamentación de la ley de Emergencia Agropecuaria y, lo que es más esperado por el sector, sobre la derogación de las normativa de la Oficina Nacional de Control Comercial Agropecuaria (Oncca) que mantiene total o parcialmente cerradas las exportaciones de granos y carne.
Por lo pronto, los autoconvocados tienen todo listo: pidieron autorización al Gobierno porteño para realizar la movilización; definieron como puntos de concentración, La Plata, Cañuelas, Luján y Escobar; y esperan formar una caravana de unos 1000 vehículos, entre tractores, camionetas y autos. Los chacareros se movilizarán desde distintas localidades de Buenos Aires, La Pampa, Córdoba, Santa Fe y Entre Ríos. Desde esta última provincia, la delegación podría ser encabezada por el propio De Ángeli. También llegarían desde Chaco y el norte de Santa Fe, donde la sequía de este año golpeó fuerte.
Fuente: José Crettaz, La Nación; FyO.