EL CAMPO EXTENDIÓ CONVOCATORIA A SINDICATOS CONTRA EL GOBIERNO.
Desde Luján, donde recibieron a decenas de productores que caminaron 12 días por "la paz y el fin del conflicto" entre el Ejecutivo y el campo, la mesa de enlace agropecuaria oficializó ayer su acercamiento a otros sectores económicos que se sienten tanto o más perjudicados que el campo por la política oficial.
Desde Luján, donde recibieron a decenas de productores que caminaron 12 días por "la paz y el fin del conflicto" entre el Ejecutivo y el campo, la mesa de enlace agropecuaria oficializó ayer su acercamiento a otros sectores económicos que se sienten tanto o más perjudicados que el campo por la política oficial. La búsqueda de unidad será principalmente con la cúpula de la Unión Industrial Argentina (UIA), aunque los líderes rurales prometieron que no será la única.
"Llegó el momento de buscar la convergencia, la del día a día, no la de la coyuntura, para el desarrollo del país", manifestó el presidente de Federación Agraria (FAA), Eduardo Buzzi, quien afirmó que los contactos trascenderán a los industriales liderados por Héctor Méndez e incluirá a otras asociaciones empresarias y sindicatos no alineados con la política K, como sectores de la Central de Trabajadores Argentinos (CTA) y gremios de izquierda.
Pero el acercamiento más avanzado es con la UIA y se produce en momentos de una fuerte interna empresaria, con referentes de las empresas más importantes buscando una representación distinta. Con los fabriles, la Sociedad Rural (SRA) tiene contactos históricos y hasta coincidencias en torno a diagnósticos y soluciones (principalmente tipo de cambio y barreras al comercio exterior) para atravesar y superar el mal momento de ambos sectores.
Incluso, en el Coloquio de IDEA que se desarrolló hasta el viernes en Mar del Plata, Méndez y el presidente de Sociedad Rural (SRA), Hugo Biolcati, plantearon la necesidad y su deseo de construir un nuevo espacio empresario para discutir una agenda común para salir de la crisis.
Biolcati, en esa oportunidad, fue duro con la administración de Cristina Fernández y les advirtió a los empresarios que "el Gobierno es enemigo de todos los empresarios, se está quedando con nuestra renta, fueron por la renta de ustedes y ahora van por sus empresas también". Méndez prefirió no entrar en esa polémica, pero remarcó que "no es tiempo de hablar con el Gobierno, sino de buscar puntos en común entre los empresarios".
La relación con el Ejecutivo reflota la interna de la UIA. Mientras Méndez se acerca al campo, la ministra de Industria Débora Giorgi visitará mañana la sede de la UIA para realizar una reunión de trabajo.
Tras el acto en Luján, Biolcati enfatizó que ahora existen coincidencias con empresarios que hasta hace unos meses no había. Y sostuvo que en las próximas semanas se multiplicarán las reuniones informales entre dirigentes agropecuarios y empresarios, con el objetivo a mediano plazo de trazar "puntos básicos para un modelo de país".
Luego, el presidente de Confederaciones Rurales (CRA), Mario Llambías, dijo que el sector busca "un país con crecimiento, desarrollo y justicia social".
Los contactos entre la dirigencia industrial y agropecuaria no son nuevos. Antes de las elecciones legislativas, incluso, se buscó reflotar el grupo de los 7, del cual participaban los más importantes industriales, banqueros y ruralistas, pero quedó solo en un intento.
Las coincidencias sobre lo que falta hacer en materia macroeconómica tampoco son nuevas. Hacia fines del año pasado, el propio Buzzi salió públicamente a respaldar los insistentes reclamos de los industriales en favor de la devaluación, como mecanismo para otorgarle mayor competitividad a la producción nacional.
El renovado acercamiento con la industria llega con una mesa de enlace que abandonó las negociaciones con el Ministerio de Agricultura, hasta que aparezcan medidas concretas a sus reclamos por la liberación del comercio de carnes y cereales y la restructuración de la Oncca.
Fuente: Paula López, El Cronista; Cuenca Rural.