El mercado local de granos se mueve en un mar de dudas
¿Subirán los derechos de exportación de soja a 33%?, ¿vendemos antes de que siga la caída del tipo de cambio? Son algunos de los interrogantes que se dan en la plaza local.

Durante la última semana el USDA publicó su tradicional reporte de Oferta y Demanda Mundial, y si bien mostró una suba de stocks finales esperados para EEUU en maíz y soja, la misma fue menor a lo esperado, y con caída de producción, lo que despertó subas. A su vez el clima húmedo en EEUU y la convicción de que la demanda seguiría activa apoyó los precios externos.
Pero localmente se multiplican las preguntas, que trataremos de responder:
· ¿Subirán los derechos de exportación de soja a 33%?
· Las bolsas se muestran preocupadas por heladas/granizo/seca para el trigo y se atrás la siembra de maíz… ¿Esto empujará los precios al alza?
· La caída del tipo de cambio ahora empuja los precios a la baja… ¿Vendemos antes de que siga?
En cuanto a los datos del USDA es posible que hayamos asistido a uno de los últimos reportes donde el mercado realmente se pone expectante por la producción norteamericana. El avance de cosecha de maíz y soja ya está dejando poco lugar para sorpresas, por lo que el foco pasará a otra cosa.
En este reporte en particular si bien los rindes de soja se incrementaron, una caída en área llevó a que la producción mermara marginalmente, cuando se esperaba un aumento. Los stocks finales igualmente subieron 1,1 mill.tt. y ya duplican los del año pasado. De todas formas el aumento fue menor a lo esperado y mucho de esto ya estaba descontado en precios.
Pero la sorpresa fue más grande en maíz, donde se esperaba un aumento marginal de rendimientos pero finamente bajaron algo. Esto amplificado por las 33 mill.ha. que siembra Norteamérica, llevó la cifra de producción a 375,4 mill.tt. 2,4 menos de lo esperado. Los stocks en tanto subieron 1 mill.tt. contra el mes anterior, quedando en 46,1 mill.tt. pero esta cifra estuvo 2,7 por debajo de lo esperado y 8,3 por debajo del año anterior.
En trigo se dieron pocas novedades para EEUU, pero a nivel mundial tuvimos datos alcista: una caída de producción en Rusia (-1,5 mill.tt.) y Australia (1 mill.tt.).
Pasando al frente local se despertó preocuación por la inclusión dentro del presupuesto de la posibilidad de que los derechos de exportación para soja puedan llegar al 33%. Inicialmente esta posibilidad era para todos los granos, pero el viernes se modificó el artículo y se dejó sólo para el complejo soja. Que se plantee esta posibilidad no implica que se produzca. Pero en caso de que eso sea así y del 29% actual se pase al 33%, los precios podrían caer 10 U$S/tt. Esta especie de permiso no implica necesariamente que se verifique la amenaza, pero la gran pregunta que queda flotando es porque pedir permiso si no se va a hacer? Esto nos lleva a la conclusión de que si bien no seríamos vendedores sólo por esto, si seríamos muy enfáticos en aprovechar las oportunidades de cerrar precios en torno a los 260 U$S/tt si se presenta.
La otra cuestión que se presentó esta semana fue el efecto de las heladas, algunos episodios de granizo y la falta de humedad en el oeste del país. Esto hizo que la Bolsa de Comercio de Rosario bajara la producción esperada de trigo de 21 mill.tt. a 19 mill.tt., mientras que la de Buenos Aires si bien mantuvo las 19,7 mill.tt. no descarta hacer recortes por estos motivos. Lo cierto es que todavía sigue siendo una cantidad muy importante de trigo, por lo que los precios no deberían subir sólo por esto. De hecho la cercanía de la generalización de la cosecha de trigo sigue haciendo caer los precios. EL productor ante esto se mantiene expectante dado que ya se vendió un tercio del trigo que espera producir. El problema es la gran concentración de estas ventas en los primeros meses de la cosecha, que ya están haciendo caer el precio.
Finalmente tuvimos otra semana de tipo de cambio en fuerte baja, lo que hizo mermar los valores disponibles. Es importante ver que esto se logró de la mano de una fuerte suba en la tasa de interés, que parece no ser sostenible en el largo plazo. En algún momento la tasa deberá bajar y allí aparecerá el piso del tipo de cambio. En el mientras tanto, si bien el precio del grano en pesos por encima de los 10.000 $ fue atractivo, lo cierto es que los valores en U$S son el verdadero termómetro de la rentabilidad agropecuaria.
Fuente. Dante Romano | Austral Agroperspectivas