EL MANEJO DE MALEZAS Y LA AGRICULTURA DE PRECISIÓN.
Existe evidencia sustancial que permite aseverar que la distribución espacial de muchas malezas, especialmente las perennes, es contagiosa -ocurre en manchones- los cuales son relativamente estables en un número dado de años. La obtención de un mapa de malezas (composición, distribución y densidades), se puede estructurar un mapa de tratamientos que tenga en cuenta: el efecto competitivo de las malezas en cuestión.
La aplicación de herbicidas es uno de los aspectos que tiene gran potencial de optimización, por varias razones, de orden ambiental y económico. La posibilidad de aplicar técnicas de precisión en el control de malezas surge de la consideración de los siguientes aspectos:
a) Existe evidencia sustancial que permite aseverar que la distribución espacial de muchas malezas, especialmente las perennes, es contagiosa -ocurre en manchones- los cuales son relativamente estables en un número dado de años.
b) La obtención de un mapa de malezas (composición, distribución y densidades), se puede estructurar un mapa de tratamientos que tenga en cuenta:
-el efecto competitivo de las malezas en cuestión.
-la respuesta de las malezas a diferentes dosis (dosis/respuesta).
Veamos a continuación el tipo de información que sería necesario disponer y/o desarrollar.
Localización en el campo
La localización en el campo puede lograrse utilizando:
a) sendas o "Tramlines" ya previstas en el campo (caso de campos europeos).
b) Sistemas de posicionamiento global (GPS).
Detección de malezas. Construcción de Mapas.
La detección de la flora espontánea puede hacerse:
a) En forma manual.
b) En forma automática.
La forma manual implica la observación y reconocimiento sistemático a pie o en cualquier vehículo (que puede ser la misma cosechadora) y el registro de malezas. En el caso de la observación a pie, el observador posee una mochila con un sistema de GPS y una computadora portátil provista con un software que le indica los límites externos del lote y su posición. El menú de ingreso le permite registrar el tipo de maleza y su abundancia en una escala sencilla (1 a 3).
La pulverización a dosis variables
La aplicación variable se puede lograr mediante diferentes aproximaciones y diseños diversos que trascienden al marco de esta síntesis, pero en líneas generales es posible puntualizar que:
- La utilización de diseños que se basan en variaciones de presión no son apropiados, dado que diferencias de dosis mayores al 20 % no se pueden lograr sin modificar la velocidad de trabajo, el tamaño del orificio de la pastilla o la calidad del pulverizado.
- La tecnología de pulverización de dosis variables depende de la utilización de nuevos diseños y tecnologías que logren rangos de variación de dosis en el orden de 7:1 y que además permitan:
-un adecuado control de la dosis que entregan.
-una resolución espacial del orden de 4 m.
-rápida respuesta a los cambios.
-capacidad para cambiar la mezcla de herbicidas
-minimizar la cantidad de "mezcla" de herbicida + vehículo que permanece en el tanque o en las cañerías.
Los equipos que se aproximan a estos requerimientos poseen un sistema de inyección del concentrado en el circuito convencional de circulación del líquido, acoplado a un botalón con multisecciones de 4 m controlados en forma independiente por válvulas solenoides.
Conviene señalar que la pulverización en este caso se realiza en tiempo real. Es decir el detector de malezas brinda señales al sistema de comando de la pulverizadora.
Un procedimiento intermedio, y que aparentemente brindaría mejores resultados es obtener el mapa de abundancia y distribución de malezas, construir un mapa de tratamiento en base a esa información y la relacionada con dosis/respuesta para cada maleza en particular, realizar la aplicación con la tecnología descripta y finalmente rehacer un mapa de efectividad o eficiencia de control, que será el inicio del mapa disponible para la siguiente campaña.
Fuente: Ing.Agr. Eduardo S. Leguizamón. Profesor Titular. Carrera del Investigador CONICET. Cátedra de Malezas. Departamento de Sistemas de Producción Vegetal. Facultad de Ciencias Agrarias. Universidad Nacional de Rosario.