Un estudio científico argentino determinó que la elección del cultivar es la variable más importante para lograr cultivos de soja con alta proteína
Se logró identificar cuáles son los materiales que contribuyen a lograr esa cualidad. Un estudio realizado por investigadores argentinos determinó que la elección del cultivar constituye la opción de manejo más importante para generar cultivos de soja con alto tenor proteico.

“Las opciones de manejo como el cultivo anterior, distanciamiento entre hileras, inoculación de semillas, fertilización fosforada y aplicación de fungicidas foliares no fueron relevantes para diferenciar lotes con una concentración de proteína de semilla contrastante”, indicó un trabajo realizado por investigadores de la Facultad de Ciencias Agrarias de la Universidad Nacional de Rosario, la Facultad de Agronomía de la Universidad de Buenos Aires y CREA.
“Se observaron correlaciones negativas consistentes entre el rendimiento y la concentración de proteína de la semilla entre los cultivares, pero no entre los sitios. Esto demostró que los sitios con alto rendimiento y alta concentración de proteínas son alcanzables”, determinó el estudio.
En soja de segunda también se detectó la elección del cultivar de soja como factor crítico en la variación del tenor proteico, seguido por las precipitaciones y temperaturas registradas durante el mes de enero (tiempo caluroso y abundantes lluvias tienden a generar menores niveles proteicos).
El estudio mostró que en soja de primera se registra un mayor tenor proteico a medida que se avanza hacia las zonas del norte del país, pero eso no fue concluyente en el caso de soja de segunda.
El análisis de los ensayos comparativos de rendimientos permitió detectar cultivares con altos y estables niveles de concentración proteica. En el caso de soja de primera, los materiales identificados fueron NS4619, A5009 y DS1470, mientras que en cultivos de segunda fueron NS4619, NS4955 y NS6248.
“El cultivar NS4619 mostró una calidad de semilla superior a la media y rendimientos adecuados (4000 kg ha) tanto en cultivos de soja de primera como de segunda”, señala el documento.
El análisis de los materiales evaluados en ensayos mostró que a medida que se obtuvieron mayores rendimientos, el porcentaje de proteína en granos disminuyó. Sin embargo, se encontró una frontera en la captura total de nitrógeno (N) de 290 kg N ha-1, la cual habría que superar para poder lograr altos rendimientos acompañados de alta concentración proteica.
Los investigadores indicaron que el gran desafío para aumentar el porcentaje de proteína con niveles altos de rendimiento radica en desplazar la frontera de exportación de nitrógeno mediante aumentos en la captura de N del cultivo, lo que invariablemente lleva a estudiar cuestiones de absorción directa y fijación biológica de N en los cultivos de soja de Argentina.
Los autores del trabajo (Management and environmental factors explaining soybean seed protein variability in central Argentina publicado en la última edición de la revista internacional Fields Crops Research) son Lina B. Bosaz, José A.Gerde, Lucas Borrás y José L. Rotundo (Facultad de Ciencias Agrarias de la Universidad Nacional de Rosario/Conicet), Pablo A.Cipriotti (Fauba/Conicet) y LucianoAscheri, MatíasCampos y SantiagoGallo (CREA). La investigación fue financiada por la Agencia Nacional de Promoción Científica y Tecnológica de Argentina y AACREA.
Fuente: Valor Soja