GRANOS: CAMBIO RADICAL EN EL MERCADO DE MAÍZ

Localmente el componente de la prima FOB para la soja Argentina fue subiendo a medida que los precios descendían en Chicago amortiguando la baja, y demostrando que en este quiebre de valores aparece el interés de los compradores internacionales.

GRANOS: CAMBIO RADICAL EN EL MERCADO DE MAÍZ

 

Si bien las grandes urgencias políticas y financieras que nos aquejaban en las últimas semanas han sido resueltas, y los cultivos de maíz y soja norteamericanos bajaron en forma inesperada para los analistas calidad la semana pasada, el reporte del USDA de stocks genera un cambio radical en la visión de mercados de maíz que puede extenderse al de trigo y en menor medida al de soja. Sin embargo, con una demanda que viene siendo contenida por los bajos stocks, plasmados en elevados precios, el potencial de caída está limitado, y además debemos tener en cuenta que si bien no se ven amenazas por el momento, las dudas sobre la pobre implantación y nacimiento de m aíz y soja norteamericano, generan dudas razonables para este año.

Localmente el componente de la prima FOB para la soja Argentina fue subiendo a medida que los precios descendían en Chicago amortiguando la baja, y demostrando que en este quiebre de valores aparece el interés de los compradores internacionales. En el caso del maíz el interés siempre estuvo presente, dado que las primas son elevadas.


 

El problema es que el régimen de ROE VERDE sigue limitando la traslación del precio del trigo y el maíz al productor Argentino, al tiempo que el margen de exportación de soja comenzó también a ampliarse, lo cual es preocupante.


 

Las principales conclusiones de la semana que pasó son las que siguen, y más abajo se detallan con mayor amplitud:


 

El reporte de stocks del USDA nos pone en evidencia de un consumo diezmado de maíz en EEUU, y de variaciones menores en soja y trigo.


 

La sorpresa del maíz generó una baja de precios que podría ser exagerada y que comenzó a despertar el consumo.


 

Una muy elevada área sembrada de maíz reportada por el USDA dispara críticas de los analistas, pero será tomada como válida al menos hasta agosto. En soja y trigo se habría sembrado menos que lo esperado.


 

Los cambios del USDA implican un nuevo escenario de stocks/consumo y precios para EEUU


 

El mercado financiero se tranquilizó luego de aprobado el paquete de ajuste en Grecia, pero en granos la mejora no llegó.


 

Esta campaña local nos enseña que el sistema de ROE VERDE, ya de por si dañino, administrado en cuenta gotas como este año es todavía peor.


 

En definitiva que hacemos con este mercado? Asegurar pisos pero sin resignar potencial de suba por un porcentaje mayor de la producción.


 

El reporte de stocks del USDA nos pone en evidencia de un consumo diezmado de maíz en EEUU, y de variaciones menores en soja y trigo.

Si bien hace tiempo que venimos notando algunas señales de un menor consumo de maíz en EEUU, y que refleja una situación que se daría en otros países en mayor o menor medida, no teníamos un dato certero que nos permitiera asegurar esto.


 

El reporte trimestral de stocks tiene por función justamente “descubrir” el consumo real de los distintos granos. Si se resta el stock al 1 de junio, el disponible al 1 de marzo, se sabrá a ciencia cierta cuanto “desapareció” o se consumió en ese plazo.


 

Como ocurre normalmente en los mercados, el problema no es el dato en sí mismo sino la diferencia entre este y las suposiciones que los operadores tienen y que se reflejan en los precios de mercado.


 

De esta forma cuando los stocks esperados por el mercado terminan siendo muy altos respecto al dato real difundido por el USDA, la conclusión es que el consumo resultó menor que lo previsto por los analistas y esto lleva a un fuerte ajuste en precios. Esto es justamente lo que pasó este jueves con los stocks de maíz. En el caso de trigo y soja las variaciones fueron menores en comparación a estas, aunque también se vieron superados los guarismos de los analistas.


 

Como se pueden ver estamos hablando de que se consumieron casi 9 mill.tt. menos de maíz que lo esperado en este trimestre, alrededor de un 10% del stock. Esto es un llamado de atención y lleva al mercado a la reflexión sobre el nivel actual de precios.


 

Uno de los grandes argumentos alcistas del maíz era que a pesar de los esfuerzos de los precios, el consumo seguía muy alto. Llegamos a esa conclusión cuando el reporte de stocks de marzo pasado mostró unas existencias bastante menores a las esperadas. Esto parecía indicar que los consumidores no eran muy sensibles a estos niveles de precio y que los mismos debían seguir al alza. Los precios de hecho subieron tanto en el mercado disponible como en la posición a cosecha norteamericana, y lo que nos encontramos en este reporte es que ante esa suba finalmente los consumidores respondieron bajando sus compras.


 

En el caso de la soja y el trigo, si bien el stock reportado por el USDA también estuvo por encima de los valores esperados, los apartamientos son menores, y podrían ser absorbidos por mayor consumo en el último trimestre del año.


 

La sorpresa del maíz generó una baja de precios que podría ser exagerada y que comenzó a despertar el consumo.


 

Esto le marcó al menos para la campaña vieja un techo al maíz, y eso es indiscutible.


 

Sin embargo la pregunta que sigue es cuanto deberían bajar los valores para que ese consumo se reactive nuevamente, ya que la demanda sigue siendo la misma, lo que ocurre es que a distintos niveles de precio nos encontramos con mayor o menor cantidad consumida. La suba de precios nos llevó a menor consumo, pero la baja que vemos ahora debería despertar a los compradores.


 

La caída de precios que se desató inicialmente por la crisis griega y una serie de elementos especulativos explicados en el reporte anterior (temor a una corrida financiera por default griego, vencimiento de opciones PUT que estaban perdiendo dinero, cercanía de la posición de entrega, alta posición comprada de fondos) habían llevado ya a un valor de maíz bastante inferior a los techos. Justo cuando estas cuestiones especulativas comenzaban a verse superadas, apareció el reporte del USDA y los precios reaccionaron violentamente a la baja.


 

La primera cuestión que debemos tener presente es que ante tamaña sorpresa, en un mercado que seguía con una posición de especuladores tradicionales muy comprada, es natural que se dé una fuerte baja por cuestiones emocionales y corte de pérdidas. Recordemos que los especuladores tradicionales son aquellos que operan anticipando la tendencia, y que se diferencian de los financieros llamados también “fondos índice” quienes mantienen posiciones compradas en granos no porque piensen que el grano pueda subir, sino porque creen que es posible que el dólar se devalúe. Cuando los primeros compran quieren hacerse de maíz porque el precio del maíz va a subir. Cuando los segundos compran maíz , en realidad están “vendiendo” dólares, porque piensan que le valor del mismo puede caer, no ven una inversión que cubra ese riesgo en forma suficiente, y por ello se desprenden de la moneda.


 

En este quiebre del mercado apareció interés comprador externo, muy posiblemente Chino, y además los márgenes del etanol y las carnes mejoraron notablemente, lo que podría llevar a un repunte en el consumo en el próximo trimestre, que será el último del año comercial norteamericano, ya que luego llegará la cosecha nueva, y el ciclo comenzará nuevamente.


 

Visto esto desde Argentina, los precios que debemos tener en cuenta nosotros son los de la posición Diciembre, es decir los de cosecha nueva, ya que tanto el maíz que pueda quedar sin vender, como el de la campaña nueva Argentina se relacionan con éste, y en ese sentido la caída de valores nos llevará muy posiblemente a aumentos en el consumo que limiten la baja.


 

En definitiva lo que debemos preguntarnos es cuál debería ser el precio del maíz una vez que pase todo este ruido. Seguramente que no serán los 800 centavos por bushel (315 U$S/tt) a los que Chicago apuntaba, pero tampoco serían los 500 centavos por bushel (297 U$S/tt) que algunos analistas predicen.

Independientemente de ese punto lo cierto es que es natural que con el cambio de expectativas los precios del maíz tengan un efecto “overshooting” es decir que el maíz baje más de la cuenta y luego rebote.


 

Por ello creemos que no es conveniente apresurarse a vender en estos precios, sino que sería más conveniente esperar una estabilización de los valores. De todas formas no estamos acá para adivinar sino para cubrir riesgos, y esto se puede hacer manteniéndose sin vender, pero poniendo pisos en el mercado para evitar pérdidas mayores. Volveremos sobre este tema y las limitaciones que esto tiene desde Argentina luego.


 

Una muy elevada área sembrada de maíz reportada por el USDA dispara críticas de los analistas, pero será tomada como válida al menos hasta agosto. En soja y trigo se habría sembrado menos que lo esperado.


 

Como si el maíz no hubiera sufrido un golpe lo suficientemente duro por los elevados stocks que se reportaron, el USDA estimó una superficie sembrada de maíz mayor a la que se esperaba. En el caso de soja y trigo resultó menor.


 

Puede parecer trivial que EEUU haya reportado un área sembrada 620.000 ha más que lo esperado y 650.000 ha mayor a la que se pronosticaba antes, pero con un rinde de casi 10 qq/ha hablamos de unas 6,5 mill.tt. más de producción.


 

En el caso de la soja el área reportada fue 540.000 ha menos que lo esperado y 570.000 ha menos que la cifra que manejábamos en las proyecciones de oferta y demanda. Con un rinde de soja de 29 qq/ha eso equivale a 1,6 mill.tt. menos de soja producida, cuando los stocks actuales finales se estaban estimando en 5,2 mill.tt. es decir que es un cambio sustancial.


 

En el caso del trigo el área reportada estuvo 530.000 ha por debajo de lo que el USDA esperaba, pero esto es sólo 110.000 ha menos que lo esperado por el mercado, y con stocks muy elevados de trigo en EEUU, no cambia demasiado el cuadro.


 

Esta proyección del USDA fue muy criticada por los analistas, operadores y productores, que ante los excesos de lluvias y las inundaciones en el noroeste creen que la superficie sembrada debería ser sustancialmente menor. Poco después de publicado el informe, el USDA publicó en su página web que como los datos para este reporte se revelaron en los primeros días de junio cuando todavía no se había podido concretar gran parte del área sembrada en cuatro estados del noroeste, se llevará adelante otro relevamiento, pero cuyos resultados recién se difundirán en el reporte de agosto, si es que hay una diferencia que lo justifique.


 

Los cambios del USDA implican un nuevo escenario de stocks/consumo y precios para EEUU


 

Si sumamos 6,5 mill.tt. de mayor producción a 9 mill.tt. más de stocks, nos encontramos con que la oferta sumaría 15,5 mill.tt. adicionales para el próximo ciclo, lo que podría llevar los stocks / consumo que se pronosticaban en EEUU en 5,2% a 9,7%.


 

De todas formas hay muchas salvedades para hacer aquí:


 

No todo el stock que se reportó de más en este informe será más stocks que pasará al stock final, ya que si el consumo empieza a acelerar ahora que los precios bajaron, estos podrían moderarse fuertemente. Tomemos entonces como supuesto que los stocks sólo suban la mitad de esto, es decir 4,5 mill.tt.


 

Hay grandes dudas sobre el área reportada, lo cual hace también dudar del aumento de producción. Sin embargo también hay dudas sobre los rindes, con lo cual el final es aquí incierto, y podrían tomarse muchos supuestos.


 

Por otro lado también habrá que ver el rinde que se logra obtener, el cual está condicionado por un lado por la siembra tardía, que implica de por sí días de maduración, horas de sol, y lleva el ciclo del cultivo a fechas más adelantadas las que terminarían llevando la floración a momentos donde las chances de sufrir clima cálido y seco son mayores.


 

Por otro lado también hay que tener presente que el mayor stock 2010/11 implica un menor consumo interno en EEUU. La pregunta es cuanto menor es y cómo proyectar a partir de él el consumo correspondiente al 2011/12.


 

Todo esto puede llevar a un abanico muy grande de posibilidades, y recién sabremos cual será el correcto al final de la campaña, y el que en el mientras tanto influirá en el mercado, cuando el 12 de agosto el USDA publique sus proyecciones de oferta y demanda.

Por nombrar un pronosticador, tomemos los números que presenta la gente de MANN FINANCIAL, a quienes la proyección de Stocks/Consumo de maíz les da 8,2% contra 5,2% de esta campaña y 5,4% del año anterior.


 

Desde un punto de vista matemático esto debería justificar una baja de precios de aproximadamente un 12%. Teniendo presente que estuvimos cotizando en torno a los 700 puntos en forma reciente, esta mejora en los stocks / consumo, manteniéndose estables los demás parámetros de mercado, debería dejarnos en los 616 puntos.


 

Ahora bien, si hacemos el mismo trabajo pero para la soja, nos encontraremos que aquí el cambio en los stocks no fue significativo, y podría absorberse con algo más de consumo hacia adelante. Atenta contra esto, en el mercado internacional de aceites, la mejor producción de aceite de palma que lleva a sus precios a bajar con respecto al de soja y termina presionando al mercado. Sin embargo también es cierto que la producción de colza en Europa fue golpeada por la seca, y que en Canadá las condiciones son complejas.


 

En soja lo que es cierto es que la sorpresa, fue la caída en la intención de siembra. Además si suponemos que el USDA realizó el mismo procedimiento para maíz que para soja, es posible además que debiera ajustar el área de siembra de soja en los cuatro estado del norte que deba relevar.


 

En la misma forma también debería el USDA hacer ajustes a los rindes esperados de soja, los cuales podrían terminar resultando algo elevados si se tiene en cuenta la siembra tardía. Sin embargo la calidad de cultivos estuvo mejorando, salvo por el reporte de la última semana donde descendió, y no hay nada en los pronósticos que nos haga pensar en una seca en el corto plazo, más allá de que las dos últimas semanas han sido secas, la buena condición de humedad en la superficie y el subsuelo, sumado a que se esperan lluvias para esta semana, nos lleva a pensar en que la soja no sufriría demasiado.


 

Si tenemos en cuenta entonces que el área de soja sería 540.000 ha menor, de una relación stocks/consumo de 5,8% calculada en el último reporte podríamos caer a una de 4.8%, lo cual también tendría un impacto a la baja en el ratio mundial, dado que se esperan también menores reservas para Argentina, Brasil y China.


 

En definitiva el reporte en el caso de la soja resultó alcista, pero el problema es que la baja en el mercado de maíz arrastró a los precios de la soja. Sin embargo esto ya comenzó a reflejarse en las operaciones posteriores al reporte del USDA, donde la soja comenzó a retomar el alza, y el maíz no logró recuperarse todavía.


 

El mercado financiero se tranquilizó luego de aprobado el paquete de ajuste en Grecia, pero en granos la mejora no llegó.


 

Como al comienzo de esta columna se comentó, uno de los temas que tenían en vilo al mercado era el posible default de Grecia. Si el mismo sucediera se justificaría una corrida bancaria, temor entre los inversores y la salida en masa de las compras de fondos financieros en maíz, soja y trigo llevarían a que los precios cayeran fuerte. Además en ese escenario Europa podría tener problemas serios no solo financieros, sino políticos, sociales y económicos, llevando a un menor consumo de energía, que pegaría en granos por el lado de los biocombustibles, y en alimentos de alto valor, como la carne, la leche y los aceites.


 

Finalmente el Ministro Griego logró que el Parlamento aprobara la ley de ajuste fiscal. La misma fue muy resistida por la oposición ya que los ajustes a practicar son significativos. Esto hace temer por la implementación de estas medidas, y a muchos les hacen pensar en que el remedio puede terminar siendo peor que la enfermedad.


 

Quede claro que tampoco abogamos aquí por el “modelo Argentino” que sería directamente decir “no pago”. Si bien es cierto que finalmente a Argentina la cosa tan mal no nos salió, esto no fue porque lo correcto fue no pagar la deuda, sino porque en medio del proceso el aumento de la demanda de productos primarios nos colocó en una coyuntura tan ventajosa, que prácticamente podríamos haber tomado cualquier decisión y los resultaos hubiesen sido igualmente positivos.


 

Volviendo a Grecia, realizar un ajuste fuerte en un momento en que la economía ya está paralizada es a todas luces arriesgado ya que profundiza la crisis en el corto plazo, a pesar de que sienta las bases para la reconstrucción posterior.


 

Quizás debería dejarse de lado las políticas que impulsan los Europeos y tomar nota de la actitud de EEUU, hogar del famoso consenso de Washington, y al mismo tiempo de la salida de la crisis emitiendo deuda, bajando tasas de interés y emitiendo moneda.


 

Lo más probable es que esta tampoco sea una salida conveniente, lo que si es cierto, es que la ayuda financiera internacional no debería estar atada a un paquete de ajuste en el corto plazo, sino a un programa de ajuste más gradual.


 

Pero lo cierto es que más allá de las dudas sobre el futuro, hoy el problema urgente de la crisis griega esté resulto. Por ello la semana pasada fue excelente para los mercados financieros, y venía aumentando a serlo también para los granos. Sin embargo el reporte posterior del USDA contrarrestó el efecto de la noticia positiva de Grecia.


 

Esta campaña local nos enseña que el sistema de ROE VERDE, ya de por si dañino, administrado en cuenta gotas como este año es todavía peor.


 

Desde que el sistema de ROE VERDE se estableció, en el cual en los hechos la Secretaría de Comercio Interior con el apoyo de la Secretaría de Agricultura y la ex ONCCA, calculaban la diferencia entre producción esperada y consumo interno, autorizando sólo la exportación de la diferencia, comentamos que esto reduce la competencia entre compradores externos y nacionales, y que como los primeros son quienes nos ponen en contacto con el mercado internacional, su ausencia una vez que se comprometía todo el saldo exportable, resultaba en separar el precio local del extranjero.


 

Si bien todos sabemos que en un mercado los precios se forman por competencia, se suele asociar esa competencia a la puja entre compradores y vendedores, cuando la puja en realidad se da entre:


 

Distintos compradores entre sí. Cuando hay mucha necesidad de compra y poca gente interesada en vender, los compradores no tienen a disposición toda la mercadería que necesitarían, por lo que comienzan a levantar el precio, no para tentar a mas vendedores a que se desprendan de su mercadería, sino para que algunos de los compradores se retiren. En el mercado de granos esta competencia entre compradores se daba en dos niveles:


 

- Entre exportadores y consumos internos. Antes de instaurarse los ROE VERDE cuando los consumos internos veían que los compradores de la exportación estaban embarcando demasiada producción y podían dejarlos fuera del mercado, aumentaban los precios internos para tentar a los productores a reservarles mercadería. Por ello los precios para los meses futuros tenían siempre premios interesantes respecto del disponible.


 

- Pero también existía competencia entre los exportadores entre sí. Los mismos tienen por misión en Argentina, como en todo país exportador de granos, asegurarse la mayor cantidad de granos posible para venderlos en otros países y aumentar su volumen de negocios. Por esto todos los años veíamos una puja importante entre compradores por quitarse participación de mercado unos a otros, lo cual impedía que cualquier intento por “ponerse de acuerdo” sobre un precio de compra menor al de la paridad de exportación fuera duradero: el incentivo a pagar más que el resto y quedarse con mayor cuota de la mercadería disponible era demasiado elevado. Esta actitud fu e reducida ya que lo que la experiencia estaría demostrando es que en las autorizaciones que se les otorgan a los exportadores para vender al exterior habría porcentajes fijos para cada uno. Como quien aprueba o no los pedidos de autorización es quien estaría controlando esos porcentajes, no hay posibilidades de que un exportador aumente su participación de mercados quitándole mercado al otro, con lo cual cada exportador sabe perfectamente cuanto podría embarcar el año próximo, y entonces traslada su objetivo a maximizar la diferencia entre precio de compra y venta.


 

Distintos vendedores entre sí, cuando muchos de ellos quieren vender al mismo tiempo, y la cantidad de compradores escasea. Esto termina llevando a que los precios bajen, independientemente de la actitud de los compradores. Esto es lo que ocurre cuando sólo quedan los consumos internos en mercado, que necesitan comprar sólo cantidades acotadas mensualmente, y no disponen de espacios físicos ni de financiamiento para adelantar compras, y los productores tienen mucha mercadería a la que quieren ponerle precio.


 

La novedad este año ha sido además de lo que comentamos antes, que como las autorizaciones previas de exportación están siendo manejadas a cuenta gotas, alegando falta de certeza en la producción y stocks disponibles de granos, se termina reduciendo la demanda de granos artificialmente, llevando a que en ciertos momentos la exportación tenga ROE disponibles, pero por un volumen tan bajo con respecto a las apetencias de los vendedores, que el precio termina derrumbándose de todas formas.


 

De esta manera quedan definidos cuatro momentos de mercado bien definidos:


 

Antes de que se otorguen ROE VERDE pero cuando el productor ya tiene intenciones de vender. En los últimos años los ROE VERDE para cosecha nueva se han comenzado a otorgar una vez que los productores habían terminado de sembrar, en junio para trigo y en octubre para maíz. Pero como los productores toman estas decisiones con mucha antelación, suelen incurrir en costos y desean cerrar las relaciones de precio entre insumos y producto en el caso de que como viene pasando sean muy convenientes, existe una intención de venta, quizás no demasiado elevada, pero si constante, desde bastante temprano en la campaña. En este momento al no haber ROE VERDE autorizado, los valores que se obtienen en mercado son muy bajos respecto de la paridad internacional, ya que como el exportador no puede anotar el ROE VERDE y de hacerlo debería pagar por anticipado derechos de exportación, se le traslada al productor un descuento mayor por estas eventualidades, y además se compra solamente si a los ojos del vendedor esto es una oportunidad muy buena, ya que el exportador sabe de todas formas cuanto es lo máximo que podrá embarcar el año próximo. Sin embargo a todo exportador le gusta trabajar con tranquilidad, sabiendo que más allá de cuánto va a poder embarcar, que tiene asegurada la disponibilidad de mercadería.


 

El segundo tramo va desde que se otorgan los primeros ROE VERDE hasta que se terminan de tomar los mismos por parte de los exportadores. Como en la producción de granos hay un riesgo climático importante, los productores nunca son agresivos vendedores de maíz y trigo antes de la cosecha. Sumado esto a que la situación financiera no amerita tener que hacer ventas para asegurarse cobros o tratar de descontar los negocios a cosecha comercialmente o en bancos, la oferta en esta etapa es baja. Es por esto que en este momento es donde más chances hay de que casi no haya diferencia entre el precio teórico de explotación y el real que se paga en el mercado.


 

Desde la cosecha hasta que se terminan los ROE VERDE. Este es el tramo novedoso. Una vez que se sabe cuánto es la cosecha no habría demasiadas razones para racionar los ROE VERDE. Sin embargo lo que vimos este año es que el Estado sigue administrando los mismos. En lugar de autorizar todo el saldo remanente de una sola vez, lo va haciendo paulatinamente por montos menores. Como los productores en este momento saben a ciencia cierta cuanta mercadería les queda, y tienen presente que si los ROE se terminan no podrán volver a exportar, entonces hay una gran presión de venta, y una administrada capacidad de absorberla por el lado de la demanda. Es as&i acute; como se produce el contrasentido de que habiendo ROE VERDE el diferencial de precios entre el precio teórico y el real sigue siendo elevado.


 

Una vez que se agotan los ROE VERDE. Llegado el momento en que el remanente entre producción y ventas al exterior comprometidas son demasiado elevadas, la posibilidad de emitir ROE VERDE se cae, y los precios quedan muy lejos del valor teórico. Queda entonces solamente los consumos internos comprando. Sin embargo como esto ocurre normalmente sobre el final de la campaña, y para este momento también los productores han colocado su producción, aceptando descuentos grandes respecto al valor teórico de exportación, la poca mercadería que queda tiene como objetivo lograr ese valor internacional. Habiendo tan poca mercadería y siendo que falta poco para la nueva campaña, si el precio que se ofrece al mercado es demasiado bajo, los productores decidirán pasar su mercadería al año siguiente, por ello en estas circunstancias, por volúmenes muy chicos, y en mercados atomizados y difíciles de encontrar, se suele pagar la paridad de exportación o algo parecido, pero por volúmenes chicos, y en un momento en el que en un sistema libre se estarían pagando elevados sobre precios por esa mercadería.


 

En conclusión para quienes hagan maíz y trigo en este año, no solamente que deberán tener presente cuanto ROE VERDE hay disponible, sino que deberían tratar de colocar la mayor cantidad posible de ese grano entre que se otorgan los ROE VERDE y antes de que exista certeza del tamaño de la cosecha, para vender en un momento en el cual al haber poca oferta, los compradores deban pujar entre sí por esos lotes.


 

En definitiva que hacemos con este mercado? Asegurar pisos pero sin resignar potencial de suba por un porcentaje mayor de la producción.


 

Hoy más que nunca quienes están habituados al uso de herramientas de cobertura van a tener alternativas de comercialización más razonables. Todos los granos venían bajando mucho y con la solución del problema griego – al menos en el corto plazo –, el cese de la presión especulativa de los vencimientos de julio, y la mayor presencia compradora, deberían los valores repuntar. La pregunta es qué tan abajo deberíamos ir por la caída de los precios del maíz?


 

Fieles a nuestro estilo de llegar a conclusiones concretas a pesar de que la aparición de elementos importantes a posteriori termine dejándonos fuera de foco, pensamos que los valores actuales del maíz podrían mejorar algo más. Especialmente si hay algún problema productivo en EEUU. Sin embargo es innegable que los stocks se hicieron más amplios, y que los precios a los que podemos llegar son menores a los que pensábamos la semana pasada. Por ello la recomendación pasaría por asegurar en mayor proporción el nivel de precios actual. Lamentablemente son muy pocas las chances de hacerlo con PUT locales, ya que a pesar de las publicaciones que los Mercados a Término realizan rebordeándose de los r& eacute;cord de volúmenes operados, en el caso de las opciones de maíz, el mismo sigue siendo insignificante, y marca el problema de la ausencia de lanzadores de opciones, relacionada con la falta de participantes de la exportación y obviamente de especuladores que jueguen con volúmenes importantes. Por esto los PUT que se ven en las pantallas no son alternativas que se puedan tomar en consideración. Eso nos deja con la única posibilidad de vender y comprar CALL en el exterior. Lamentablemente esto nos terminaría obligando a tomar valores que son mucho menores a los que vimos en el comienzo de la campaña, pero peor sería tener que tomar otros menores más adelante si el mercado jugara en contra.


 

En el caso de la soja la situación de oferta y demanda no cambió tanto, pero es cierto que si el maíz aflojara se llevaría consigo a la soja. Por eso tendríamos también que cubrir en más proporción la soja. En este caso si hay más opciones, pero como falta mucho tiempo para mayo 2012, las mismas son algo caras si se quieren cubrir valores que al productor le resulten interesantes. Dado que en este mercado el volumen es algo mayor localmente, pero tampoco es lo suficientemente fluido como para estar seguro de que se podrá tomar ganancias en medio del proceso, se tiene la cuasi plena certeza de que el valor tiempo que se pague ahora se perderá. Por ello resulta un imperativo reducir el pago de valor tiempo de la opción. Esto se puede lograr comprando opciones noviembre 2011, y guardando parte del presupuesto para coberturas a fin de una vez que llegue noviembre, si la opción no es ejercible comprar otra a mayo, o bien lanzar alguna otra opción. El año pasado basta como ejemplo de lo peligroso que puede ser poner techos mediante venta de CALL, ya que la situación es tan ajustada en el mundo de las oleaginosas que los precios pueden ser demasiado volátiles a la suba. Por ello preferimos recurrir al spread de PUT más que a las estrategias de piso y techo.


 

En el caso del trigo también trataríamos de ir por las opciones PUT diciembre, ya que recién estamos entrando en la segunda fase de los ROE antes descripta, y los exportadores todavía no están muy presentes en el mercado interno, así que los diferenciales contra el internacional son algo bajos.


 

Fuente: Dante Romano, Director Académico del Centro de Gestión Agropecuaria; Agrositio.

Volver

Otras Novedades

26/04/2024

El problema es otro está por formalizarse un anuncio de Caputo para el campo y siguen los reparos en una industria

26/04/2024

No hay lucha que alcance le ganó un juicio al municipio, denuncia que no cambió nada y el intendente le contestó

26/04/2024

Provocó estragos llegó el frío y hay dudas sobre si alcanzará para ponerle fin a una plaga

26/04/2024

Llovió hasta 350 mm y hay una gran incertidumbre en algunas regiones productivas

26/04/2024

Agrodivisas sigue muy retrasada la cosecha de soja y sorprenden los malos rindes logrados en el norte

26/04/2024

Estás esperando una recomposición del precio del trigo para poder vender No tenemos buenas noticias para darte

25/04/2024

Remedio. El campo pidió en la Legislatura bonaerense frenar las fuertes subas de un impuesto de Kicillof

25/04/2024

Cebada. Aumento en el precio de la cervecera por problemas climáticos

25/04/2024

Fuera de control. Temor en dos municipios por crecientes hechos de inseguridad en los campos

25/04/2024

Ahorro de burocracia. El Gobierno de Milei derogó resoluciones kirchneristas y hay alivio para un negocio