La inseguridad rural, un flagelo que aqueja a los productores y que tiene solución
A lo largo de todo el país, los delitos contra las haciendas se repiten día a día; una empresa ofrece un servicio para combatir las problemáticas más frecuentes. Incendio intencional, abigeato, rotura de silobolsas, usurpación de campos, robo de maquinarias, cosecha o agroquímicos, son los principales de delitos rurales contra los que todos los días se encuentran los productores en el país.

Cuando un intruso ingresa al predio de un productor, las consecuencias pueden ser graves. La rotura de silobolsas genera un gran perjuicio económico al igual que la pérdida de un ganado con potencial genético, o la misma integridad física de los hacendados.
En septiembre, cuatreros faenaron en Rafaela, Santa Fe, dos terneros con alto potencial genético. La cabaña afectada es una de las más premiadas por la calidad genética que posee en raza Holando. Al daño irreparable se suma que los terneros pesaban unos 70 kilos, por lo que los delincuentes no iban a poder extraer mucha carne.
Por citar otro ejemplo, en mayo, la Asociación Agrícola Ganadera de la localidad de Justo Daract en San Luis emitió un comunicado donde expresaron su preocupación y disconformidad debido a la creciente ola de inseguridad en zonas rurales. En uno de los casos, de 2020, un productor de la zona denunció tres robos en su establecimiento. En el primero, fue maniatado por los ladrones y golpeado con un revólver; el segundo se produjo en su ausencia y en el tercero los delincuentes lo esperaron cuando volvía a su casa.
En Chaco, el presidente de la Federación Chaqueña de Asociaciones Rurales, Daniel Fontana, aseguró que “antes estaba acostumbrado a que le roben dos o tres terneros al año, pero ahora le saca al menos uno por mes”. El dirigente señaló que según estadísticas que llevan los productores, entre la hacienda que se roba y se denuncia y la que no llega a los sumarios policiales, se llegaría a cerca de mil cabezas robadas al mes. El impacto económico es de alrededor de $50 mil por animal.
Los casos se suceden en todo el territorio nacional, y los productores suelen verse en problemas si no tienen un sistema de seguridad acorde a la extensión de su terreno y al valor de su ganado. Los casos pueden repetirse si no se aplica una metodología estratégica que permita disuadir intrusos y evitar episodios de abigeato, rotura de silobolsa, y demás delitos rurales.
Un sistema que brinda una solución a la inseguridad rural
El sistema se llama Cámara Campo®, es impulsado por la empresa de capitales chaqueños SISE Argentina, y su fabricación es desarrollada por profesionales de esta provincia, especialistas en la materia.
Se trata de una solución de video vigilancia 100% autónoma, a través de una cámara robot de alta definición que cuenta con movimientos verticales, horizontales y un potente zoom de alcance real llegando a más de 1.500 mts. durante el día y 250 mts. en plena oscuridad, capaz de grabar vídeo y ver sus imágenes en tiempo real, desde cualquier smartphone o PC, incluso en aquellos lugares donde no existe internet, ni luz eléctrica, gracias a que la misma se retroalimenta mediante paneles solares.
Esta innovadora solución no solo es resistente a climas adversos, soportando fuertes lluvias, granizo, nieve y altas temperaturas, sino que también cuenta con inteligencia la cual a través de sensores permite detectar movimientos y enviar notificaciones automáticas a dispositivos móviles, como también activar sirenas o luces para disuadir. A su vez el usuario puede controlar la cámara estando en cualquier parte del mundo. Es una solución libre de mantenimiento y de altas prestaciones la cual permite no solo mejorar la seguridad en los espacios rurales, sino controlar a distancia las actividades en el mismo indica Marcelo Freschi CEO de Grupo Sise S.A.
Para mayor información sobre los productos de SISE Argentina, contactarse al número telefónico 0-800-222-5153 o vía WhatsApp 362 423-1144. También por email a info@camaracampo.ar.
Fuente: Agrofy News