ASEGURAN QUE LA CRISIS EXTERNA NO AFECTA A LOS PRECIOS GANADEROS LOCALES
Es porque el 90 por ciento de la producción argentina se vende al mercado interno, que todavía no muestra señales de agotamiento, indicó un especialista. Y añadió: “sin embargo, en el mediano plazo, la crisis podría pegar a través de una caída de la actividad económica local”.
La crisis internacional aún no impacta en las cotizaciones locales de carne porque el 90 por ciento de la producción argentina se vende al mercado interno, que todavía no muestra señales de agotamiento.
Así opina el especialista en mercado de carnes Ignacio Iriarte, para quien hasta ahora, la crisis internacional "no afecta el precio del novillo en nuestro país".
La oferta de carne disponible es un 10 por ciento más baja que el año pasado para esta época y un 27 por ciento más reducida que hace dos años, sostiene, según consignó NA.
"El mercado parece estar en un punto muerto, donde el precio del novillo no sube porque la demanda no está dispuesta a convalidar nuevos aumentos, y no disminuye porque la oferta disponible para el mercado interno es extraordinariamente baja", analiza.
Los precios reales del novillo, pese a la erosión sufrida en el último año, "siguen siendo excepcionalmente altos".
"En el corto plazo, la crisis mundial debería entrar a nuestro mercado ganadero de la mano de un empeoramiento de la actividad exportadora, pero ésta, que se encuentra en pleno proceso de conversión al mercado interno, no sufre todavía de una baja significativa en los precios FOB", según Iriarte.
Sudamérica, liderada por Brasil y Uruguay oferta muy poca carne, y "si bien la demanda europea o rusa está intentando pagar menos, los precios no bajan porque la escasez es muy marcada".
La salida de Paraguay del mercado no ha hecho otra cosa que acentuar esa escasez. En el mediano plazo, la crisis podría pegar a través de una caída de la actividad económica local, y en una baja en la demanda doméstica por carne vacuna.
La caída del precio del novillo en Brasil en dólares del 15 por ciento, que siguió a la devaluación, y la baja constante del valor del ganado en Uruguay, "alejan a nuestra carne cada vez más del mercado internacional", expresó el especialista.
Se ingresa en el semestre, noviembre a abril, de menor oferta ganadera en el año, y los exportadores argentinos enfrentan un precio creciente del novillo pesado y de la vaca, a contramano del mundo, o al menos, de lo que sucede en los países vecinos.
Argentina vende poco afuera, la cuota Hilton, a Israel y Europa y a precios muy altos, pero la oferta sudamericana de carne en algún momento -hacia fin de año- va a tender a recuperarse.
"Si las cosas siguen así, todo indica que va a ser muy difícil no verificar caídas en los valores FOB. Si esto sucede, y se combina con una baja en el valor de los cueros, podría complicar aún más la situación de los exportadores", dijo.
El feedlot está con bajos niveles de ocupación y "está vaciándose más temprano que otros años". "La crisis comienza entonces justo cuando empieza el semestre que por razones estacionales es el de menor oferta del año", manifestó Iriarte.
Fuente: El Enfiteuta, Campo en Acción.