Elecciones, próximo Gobierno y versiones de otro tipo de cambio especial. El combo que tiene en vilo al mercado de soja
Luego del dólar soja III, que estuvo vigente entre la segunda mitad de abril y el 31 de mayo pasado, la venta de la oleaginosa se desplomó hasta un nivel muy bajo en medio de un combo donde influye el resultado de las elecciones, las expectativas sobre cambios en la política hacia el sector con un nuevo Gobierno
Luego del dólar soja III, que finalizó en mayo pasado, la actividad comercial se redujo significativamente y hay inquietud en despachos oficiales
Luego del dólar soja III, que estuvo vigente entre la segunda mitad de abril y el 31 de mayo pasado, la venta de la oleaginosa se desplomó hasta un nivel muy bajo en medio de un combo donde influye el resultado de las elecciones, las expectativas sobre cambios en la política hacia el sector con un nuevo Gobierno y hasta, otra vez, las versiones en el mercado sobre si, necesitado de divisas, el Gobierno avanzará en las próximas semanas con un dólar soja IV para reactivar la comercialización.
Respecto de este último tema, ante una consulta de LA NACION, en la Aduana, cuyo titular Guillermo Michel se ha transformado en el hombre fuerte del Ministerio de Economía no solo para el control de los precios sino en el seguimiento de varios temas vinculados con el agro, negaron la posibilidad de otro dólar soja. En Agricultura hasta ahora no respondieron a este medio. Sin embargo, hay fuentes al tanto de los movimientos del Gobierno que sostienen que, si bien no hay decisión tomada, comenzó a ponderarse la chance de un cambio superior a los $400 y más próximo a los $450 para que puedan ingresar unos US$2500 millones como mínimo. Ese dinero se aplicaría para el pago de importaciones: solo en el campo se requeriría importar insumos en los próximos meses por unos US$2000 millones. Hace 10 días, vale recordar, el equipo económico de Sergio Massa le había dicho a los exportadores que estaba descartado otro dólar soja.
Por el dólar III, que reconoció un tipo de cambio a $300, los productores vendieron 8,3 millones de toneladas y el Gobierno logró que la agroexportación ingresara divisas por 5127 millones de dólares.
Antes, con el dólar soja II, de diciembre último, consiguió que los productores comercializaran 5,3 millones de toneladas. El volumen fue de 13 millones de toneladas con el dólar soja I, de septiembre de 2022. Hace unas semanas, en tanto, se conoció que con el dólar maíz, que se puso con un tipo de cambio a $340, hoy superado por la devaluación que llevó el mayorista después de las PASO a $350, el Ministerio de Economía captó 2127 millones de dólares. Esto fue luego que los productores vendieran 7,1 millones de toneladas del cereal.
“Se sigue comercializando muy poco, desde que se terminó el dólar soja por semana son muy bajos [los volúmenes], en algunos casos entre 100.000 y 200.000 toneladas por semana. Con el dólar maíz se vendió mucho maíz y ahora, como siguen habiendo comentarios o rumores de que van a tener que sacar un nuevo dólar soja, menos nivel de venta hay y más con el nivel de incertidumbre”, apuntó Paulina Lescano, analista del mercado de granos. Lescano estima que quedan por comercializar unos 9 millones de toneladas. A valores de exportación son unos US$4800 millones.
Otras fuentes del mercado coinciden en la cifra del volumen y estiran hasta 10 millones de toneladas lo que resta por comercializar. No obstante, en su informe semanal sobre compras, la Secretaría de Agricultura de la Nación relevó que al 16 del actual industria y exportación adquirieron 11.788.900 toneladas de soja 2022/2023, de las cuales 3.856.700 toneladas fueron entregadas a fijar, es decir, sin un precio firme. En función de ese volumen ya comercializado, y de las últimas estimaciones agrícolas oficiales que el jueves pasado ponderaron una oferta de soja 2022/2023 de 36,44 millones de toneladas, compuesta por un stock inicial de 11,44 millones y por una cosecha de 25 millones, todavía quedarían por ser negociadas 24.651.100 toneladas de la oleaginosa. Cabe señalar que a ese volumen habría que restarles los 6,94 millones de toneladas que Agricultura proyectó como existencias finales. Si se sacan las existencias finales quedarían en esta cuenta 17.711.100 toneladas.
Hoy el mercado está con poca oferta de soja que, según los días, ronda las 20.000 toneladas o poco más de eso. El último salto de ventas significativo se dio el martes 15 del actual tras la fuerte devaluación del peso. Ese día las propuestas de las fábricas saltaron de 100.000 a 125.000 pesos y se vendieron unas 110.000 toneladas, contra las 35.000 toneladas vendidas en toda la semana anterior a ese día.
“El mercado de soja se encuentra prácticamente vacío de oferta por parte de los productores, con negocios y fijaciones muy puntuales para atender necesidades financieras”, señaló Eugenio Irazuegui, de Zeni. Según el analista de la firma, tras la devaluación “las ofertas de compra por parte de las fábricas se adecuaron en el segmento disponible a niveles de 125.000 a 130.000 pesos por tonelada según plazos y condición de entrega, incluso con valores que superan las paridades teóricas, debiendo incurrir en márgenes negativos para hacerse de mercadería”.
Irazuegui amplió: “Además, con la asimilación de los resultados electorales, se afianza la expectativa de unificación de los tipos de cambio e incluso una supresión de los derechos de exportación de acuerdo a las propuestas económicas reportadas por el candidato más votado [Javier Milei]. Estas razones reducen notablemente los incentivos a desprenderse de los granos, a pesar de las elevadas tasas de interés y el costo de oportunidad que ello implica. Hoy en día quedan aproximadamente 9,20 millones de toneladas de soja por comercializar a lo que se suman otras 1,25 millones de toneladas pendientes de fijación”. El analista indicó que el remanente es en función de las ventas del momento y la cosecha obtenida [20 millones de toneladas según la Bolsa de Comercio de Rosario]. No incluye mercadería vendida a fijar precio.
Ariel Tejera, de Grassi, también destaca el bajo movimiento del mercado. “El productor está comercializando solo lo necesario ante la posibilidad de un cambio de gobierno y la posible modificación en el esquema de retenciones y en la política cambiaria”, señaló.
FMI y dólar soja
Como se informó ayer, el Gobierno logró del FMI un desembolso de US$7500 millones. Con ese monto se enfrentaron compromisos con otras entidades y el mismo organismo y quedaron unos US$3400 millones que se destinarán para intervenir el mercado cambiario y enfrentar próximos pagos.
En este marco, en medio de la queja de diversos sectores porque está trabada la importación ante la falta de dólares, fuentes consultadas indicaron que se habría puesto la lupa en otro dólar soja con la expectativa de que al menos puedan ingresar unos US$2500 millones para hacer frente al compromiso de insumos. Como se mencionó, en Aduana dijeron “no hay nada” sobre esa posibilidad.
Vale recordar que otras veces el Gobierno negó esta herramienta y luego la aplicó. En tanto, ante una pregunta Gustavo Idígoras, presidente de la Cámara de la Industria Aceitera y el Centro de Exportadores de Cereales (Ciara-CEC), apuntó: “Como exportadores el Gobierno nos aseguró que no habrá dólar especial para la soja”. En medio de la baja cosecha y la poca venta, la industria está operando con el riesgo de cerrar líneas de producción.
Fuente: Diario La Nación