TRIGO Y MAÍZ: AGRICULTURA QUIERE QUE EL NUEVO ESQUEMA SALGA EN 10 DÍAS

Solís, en exclusiva, cuenta en detalle la reunión con AFA

“La verdad, estamos muy satisfechos. Pensar que tan sólo hace 64 días diseñamos una propuesta de un sistema comercial para trigo y maíz que destrabe los actuales problemas que sufre el productor y hoy, cuando se la presentamos al gobierno tras haber obtenido el consenso de la cadena comercial, les gustó mucho y quieren avanzar en su aplicación cuanto antes”, reflexiona el gerente general de Agricultores Federados Argentinos (AFA), Gualberto Di Camillo,tras despedir al ministro de Agricultura, Julián Domínguez, quien ayer viajó a Rosario especialmente para escuchar la presentación del nuevo esquema (cuyos detalles podes ver en el archivo adjunto).

Mientras punto biz hablaba con Di Camillo se veía en la principal sala de reuniones de la sede de AFA los rastros del encuentro reservado que comenzó cerca de las 14 y terminó pasadas las 17. Allí estuvieron, tomando cuatro rondas de café y comiendo masitas secas, el consejo directivo de AFA junto con Domínguez, el subsecretario de Agricultura, Oscar Solís, el Subsecretario de Agricultura Familiar Guillermo Martini, el subsecretario de Emergencia y Desastre Agropecuario Haroldo Lebed, y el diputado electo Omar Perotti, esta última una presencia que no pasó desapercibida por las versiones de que podría suceder a Domínguez en la cartera agropecuaria.

El presidente de AFA, Carlos Trevisi, de viaje por Roma, se comunicó vía teleconferencia para sellar el aplauso final. “Hay que resaltar que lo importante es que este esquema le da la llave para exportar a los productores al mismo tiempo que reserva mercadería para la mesa de los argentinos. Con este sistema, el productor podrá acceder a los precios internacional de trigo y maíz, que hoy no puede obtener”, insiste Di Camillo.

Al término del encuentro, Domínguez habló con la prensa y ratificó, como señal política, que el gobierno buscará darle más injerencia a las cooperativas en el comercio granario. “Las cooperativas son aliadas estratégicas de este modelo de producción nacional, y estamos estamos impulsando medidas concretas que permitan darles mas participación en las exportaciones de granos y evitar así la cartelización”, resaltó.“Respaldamos este nuevo esquema comercial que nos presentaron para se podrá lograr que las cooperativas alcancen el 33% en la comercialización de granos, para que estas entidades sean más competitivas”, destacó Domínguez.

Punto biz entrevistó en exclusiva a Solís para conocer los detalles. Por ejenplo, ¿lo aprueba Moreno? ¿Qué pasará con la cosecha vieja? ¿Cúando se aplicaría?

¿Qué se decidió?

Analizamos los mecanismos para tener un esquema comercial que haga más fluida la comercialización de trigo y maíz. Habíamos anticipado los trazos generales a la presidenta Cristina Fernández en la pasada reunión con Coninagro para que esté bien al tanto sobre qué líneas se estaba trabajando, pero en esta reunión de trabajo con AFA de hoy terminamos de ver el tema más en detalle. En concreto, recibimos formalmente que AFA consensuó con el resto de los actores de la cadena comercial la propuesta para negociarla con Comercio Interior con el objetivo de que esté en funcionamiento en los próximos 10 días.

¿Incluiría la cosecha vieja?

Básicamente, nuestro apuro es para que incluya la cosecha vieja. Claramente este esquema entrará a funcionar para la próxima cosecha, pero nuestro objetivo es que la cosecha vieja también entre, sobre todo porque nos permitiría claramente tener un volumen de stock de arrastre importante para la próxima.

¿Cómo se implementaría el nuevo esquema?

Esto es lo que todavía estamos definiendo. Tenemos que ajustar primero el tema con el secretario Guillermo Moreno y una vez que esté definido, la presidenta hará el anuncio. Posiblemente se presente a la prensa en el marco de la Mesa de Trigo.

¿El proyecto que queda es el de AFA o el que tiene las correcciones de la Bolsa de Rosario?

Es el que tiene los aportes de la Bolsa. Es el proyecto que está consensuado con todos los actores de la cadena.

Entonces, no incluye el fideicomiso pensado originalmente por AFA para compensar el desajuste de precios que puede sufrir el productor del grano cuando tiene que vender lo que corresponde para el mercado interno.

Fue excluido el fideicomiso.

Entonces, sino está el fideicomiso, que iba a ser administrado por Bolsas con fondos estatales, ¿con qué mecanismo se va a garantizar que la mercadería que se tenga que destinar a mercado interno no pase como ahora que se vende a precios mucho que el FAS más bajo porque los molineros aprovechan la falta de competencia?

Vamos a poner en marcha otros instrumentos, como financiación a tasa subsidiada para que el productor no malvenda y vamos a impulsar que el productor tome cobertura y arbitre posiciones en los mercados a futuro. Hay una serie de herramientas, y veremos cuáles son las más adecuadas.

¿Le alcanza al gobierno este grado de adhesión que obtuvo el proyecto de AFA y la Bolsa? Si bien sólo CRA se opuso, muchos lo hacen con reservas reconociendo que es mejor que el actual pero no el que mas conviene.

Este nivel de consenso alcanza para preservar nuestros objetivos, que era primero garantizar el consumo local de la mercadería y dejar en libre disponibilidad para que todo el saldo, exceptuando el stock de seguridad, se pueda canalizar rápidamente para exportación.

En el nuevo esquema la clave estará en que se mida bien el estimado de producción para poder dividir entre exportación y consumo interno ¿Lo va a hacer el gobierno en soledad a ese cálculo o convocará a las entidades rurales?

Claramente, el Ministerio de Agricultura, y más precisamente mi subsecretaría, está la Dirección de Estimaciones Agrícolas que es el único ente oficial capaz de hacer estas estimaciones. Pusimos un montón de recursos, nuestros números son los mejores y nadie puede competir en la elaboración de esa información. Y esa es la información que vamos a poner a disposición.

Los sectores privados piden un consejo consultivo con opinión vinculante.

Estamos claramente abiertos a escuchar, dialogar y que estén los actores privados de la cadena comercial para ajustar volumen, ya que ese número será el que dispará los porcentajes y lo tenemos que hacer bien.

¿El nuevo sistema también incluye maíz o es sólo trigo?

También maíz porque lo que necesitamos es resolver la comercialización de ambos cultivos. Pero hay que reconocer que también se dificultaba la comercialización porque faltaba una declaración mayor de los agricultores, falta que también nos inhabilitaba las negociaciones internas en el gobierno. Es por eso que lo bueno de este nuevo esquema es que nos daría la posibilidad de dar respuesta a la necesidad del productor y del Estado de tener registrada la producción.

¿Quién emitirá y controlará todo lo referente a los certificados?

La Afip.

Los corredores pidieron, con casi consenso pleno, que los certificados estén bajo control del productor. Pero los acopiadores insistían con que el trámite sea bajo formato del certificado 1.116, que es el que ellos otorgan, quedando así todo el manejo en ellos. ¿Qué se decidió?

Va a haber un 1,116 tradicional, pero sobre ellos saldrán dos certificados adicionales donde, por decirlo así, el productor tendrá bajo su control como casi un pre-Roe con lo cuál no tiene la necesidad de malvender la producción sino que podrá defender el precio. Nuestro intención es que no sea un negocio de certificados. La intención es definir en cada región en función de la calidad, cuál es el verdadero porcentaje a dividir. Tal vez en Entre Ríos sería el 80/20 porque no hay cadena panadera. También es un caso especial lo que pasa en el sudeste bonaernese.

Hay temor de que el nuevo sistema entorpezca las operaciones foward. Se habla de que el 20% se podría usar vía foward. ¿Qué se decidió?

El foward debería seguir funcionando como lo hace en la actualidad porque en definitiva va a poder completarse cuando tenga certificados de libre disponibilidad de la mercadería, por lo que cuándo el exportador esté comprando después tendrá que conseguir del productor ese certificado para poder embarca. Es decir, estamos poniendo en cabeza del productor el verdadero hacedor del negocio y que el ritmo de la comercialización no lo ponga otro eslabón de la cadena.

En tren de darle agilidad al comercio, sobre todo teniendo en cuenta cómo es el negocio exportador, en el proyecto corregido de la Bolsa se mencionaba la posibilidad de que el exportador pueda recibir el ROE y contar con 60 días para presentar el certificado. También los exportadores pedían registrar anticipadametne las declaraciones juradas para exportar sin tener el certificado de libre disponibilidad, pero teniéndolo que presentar para completar el trámite. ¿Qué pasó con esos puntos?

Hay muchas cosas operativas que se irán ajustando. Estos temas son menores. Nuestra preocupación central es que otro sector de la cadena no se siga quedando con 50/60 dólar por tonelada que son del productor. Este esquema es muy superador al actual.

Hay exportadores medianos que están pidiendo que se les exceptúe del pago anticipado de retenciones porque, a diferencia de los grandes traders, no pueden hacer frente a esa presión financiera. ¿Está en discusión este punto?

Eso no está hoy en discusión. Nuestro objetivo es solucionar hoy a los productores.

Finalmente, ¿hay avances en autorizar la conversión del corredor en consignatario? Ellos sostienen que eso lo habilitaría a comprar y vender y para poder, arbitrando posiciones con mercados a término, lograr mejores precios para sus comitentes, posibilidad que hoy sólo tienen los corredores que tienen operaciones integradas con acopios o los llamados corre-acopios

Lo estamos trabajando. Es una propuesta que se analiza dentro del plan de comercialización que tiene el PEA. Hay que seguir charlando, sobre todo con la AFIP.

Fuente: Mariano Galíndez, Punto Biz.