La carrera de obstáculos para llegar a una primera meta 150 millones de toneladas
Más de 200.000 empresarios rurales han apostado al nuevo sendero para lograr una argentina que merece volver a ser reconocida como abastecedora confiable de alimentos y energía renovable.
Las eliminaciones de las restricciones para exportar y la esperanza de poder acceder más fácilmente a la tecnología de punta, tan necesaria para mejorar aún más la eficiencia productiva e incrementar la oferta de alimentos, fibras y biocombustibles, son entre otros los factores impulsores de una mayor inversión.
Los objetivos planteados por el gobierno nacional deben convertirse en políticas de Estado, con el respaldo de la seguridad jurídica necesaria para otorgar la tan ansiada previsibilidad y tranquilidad a los empresarios para aumentar la inversión.
Una argentina competitiva y abierta al mundo, es lo que nos merecemos. Para lograrlo se requiere mejorar la competitividad sistémica a lo largo y ancho de todo nuestro territorio. Gracias a este nuevo rumbo la producción de granos podría brindarnos un salto productivo, en la campaña 2024/2025, es decir la próxima, podríamos aspirar los 150 millones de toneladas y caminar hacia las 170 esperadas, y como incentivo arrancar con la reducción de los derechos de exportación.
Recordemos que la bioeconomía ha aportado el 67% del total de las divisas que ingresan al país y que ocupa a más de 3,7 millones de trabajadores y por ello es tan relevante que durante el presente año pueda invertir consolidándote.
En ganadería bovina, en el 2024/25 podríamos lograr nuevos récords camino al millón de toneladas exportadas, una aspiración que se podría cumplir gracias a “prohibir, el prohibir exportaciones”.
La eliminación de las restricciones a los distintos cortes y el primer paso a la adecuación del tipo de cambio oficial, impulsará el desarrollo sustentable y permitirá a sector ganadero y su industria mejorar la ecuación de negocio de la carne, impulsar la producción de animales más pesados e ingresar más cantidad de divisas. Esto redundará en una mayor productividad por cabeza en beneficio de toda la población, ya que, aunque parezca una contradicción la mejoras en las exportaciones aumentará la oferta de kilos en el mercado interno, debido al incremento de peso por cabeza.
De esta manera se impulsa una mayor implantación de pasturas, verdeos y reservas, la búsqueda de mejoras genéticas, un mejor manejo sanitario y nutricional, con la esperanza de aumentar la eficiencia de los rodeos en todas las regiones productivas.
Mejorar el negocio ganadero es fundamental, en momentos que los precios internacionales no son tan atractivos. El productor ganadero invertirá cerca de 20.000 millones de dólares durante el presente año, por ello es relevante anunciar una la reducción progresiva de los derechos de exportación, que han pasado del 9% al 15% transitoriamente. Además, la producción de carnes porcina y aviar, seguirán batiendo records de producción y exportación, aportando así mayor oferta para el mercado interno de carnes alternativas y generación de divisas.
Por ello, es tan necesario sortear los obstáculos que nos perjudican. Una vez alcanzada la seguridad jurídica y que esta otorgue previsibilidad, se requerirá dar señales claras sobre la reducción progresiva hasta su eliminación de los derechos de exportación; consolidar la desregulación y la eliminación de toda traba para exportar.
Pero la mejora de competitividad no termina ahí, lo anterior es una condición necesaria pero no suficiente, con el sistema que proponga el gobierno debe impulsarse una política intermodal que brinde eficiencia y eficacia a todos los medios de transporte de cargas. Mejorar la infraestructura de las rutas, los caminos rurales, las vías férreas y la fluvial, para que los productos argentinos estén más cerca de los consumidores. A lo largo de la historia los altos costos internos de transporte nos han limitado para llegar a todos los rincones del mundo compitiendo con otros jugadores.
Otro factor relevante es mejorar el acceso a la energía y conectividad de las empresas rurales, hoy la energía renovable es una alternativa válida pero aun costosa para las empresas y la conectividad no llega, reducir la presión fiscal sobre estos servicios y mejorar la competencia de los mismos, mejorara el bienestar de la población rural, su arraigo y, además, facilitara la educación, capacitación y toma de decisiones de los empresarios.
Los empresarios rurales, están entrenados en sortear obstáculos y, si bien existen hoy muchos obstáculos para superar, la buena noticia es que estamos comenzando a lograrlo, paso a paso, cada uno deberá se sorteado, quizás de distinta manera, pero el objetivo está claro. La Argentina va camino a reposicionarse como un país confiable como abastecedor de alimentos, fibras y energía renovable, en un mundo cada vez más exigente.
Fuente: Diario La Nación