Presente complejo para los engordadores a corral, que pierden 51.662 pesos por cabeza
El resultado negativo es producto, principalmente, de un alto valor de compra de los terneros, en torno de los $1679 por kilo, y de un menor precio de venta de los novillitos, con $1486 por kilo. En el engorde a corral de animales para consumo liviano se pierden 51.662 pesos por cabeza con los valores actuales de la invernada y del novillito gordo. Ese resultado se obtiene en un modelo preparado por AZ-Group,
El resultado negativo es producto, principalmente, de un alto valor de compra de los terneros, en torno de los $1679 por kilo, y de un menor precio de venta de los novillitos, con $1486 por kilo
En el engorde a corral de animales para consumo liviano se pierden 51.662 pesos por cabeza con los valores actuales de la invernada y del novillito gordo. Ese resultado se obtiene en un modelo preparado por AZ-Group, que compra terneros y terneras de 180 kilos y los vende terminados con 320 kilos. La ganancia diaria de peso es de 1,07 kilos por día.
El resultado negativo es consecuencia, principalmente, de un alto precio de compra de los terneros ($1679 por kilo) y de un menor precio de venta de los novillitos ($1486 por kilo), a los que se deben agregar los gastos de comercialización, con un costo del maíz de $160.000 por tonelada. El modelo arroja un costo del kilo vendido, que incluye la compra del ternero, de $1651 por kilo.
El último margen bruto instantáneo positivo del feedlot se había alcanzado en agosto de 2023, tras lo cual inició un camino descendente que culminó con la pérdida de 51.662 pesos por cabeza de enero de 2024, que resulta lo peor de la serie de los últimos tres años. El trabajo indica que, para nivelar ingresos y gastos de la actividad, el precio del ternero debería bajar a $1392 por kilo o el de venta debería subir a $1651 por kilo.
Pocas esperanzas de cambio
Las cuentas de los feedloteros empeoran si se vuelcan a animales más pesados. Si se compran terneros machos recriados de 342 kilos y se venden novillos de 460 kilos, se pierden 80.782 pesos por animal. Ese resultado se deriva de pagar $1513 por kilo de ternero y de cobrar $1488 por kilo de novillo, con más kilos de alimento para producir un kilo de carne.
El modelo calcula que el costo del kilo vendido asciende a $1674. Para que este planteo equilibre ingresos con gastos debería comprar terneros recriados a $1322 por kilo o vender los novillos pesados a $1674 por kilo.
De cara a lo que viene, no es fácil proyectar un aumento importante del valor del novillo gordo en moneda constante en los próximos meses, si se tiene en cuenta el nivel de deterioro de los salarios de la población. Por ejemplo, en enero de 2024 se pueden comprar 252 kilos de novillo con el salario de un empleado rural, muy lejos de los 325 kilos que conforman el promedio de la serie 2017/2022.
Tampoco es esperable una baja sustancial del precio de los terneros, en un contexto de abundante oferta forrajera en los campos de invernada, que enfrenta una zafra de terneros menor a la del año anterior.
Fuente: Diario La Nación