Lo que no queríamos que pase, está pasando. La dura advertencia de una entidad del agro sobre el cambio de las condiciones climáticas para los cultivos
La Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) dijo que si no llueve en los próximos 15 días, “la cosecha se desplomará”; la falta de precipitaciones y las altas temperaturas hicieron caer en una semana del 90% al 65% la condición muy buena/excelente de la soja
Si en 15 días la situación no cambia, lo que hoy pasa en suelos malos, pasará en los buenos y la cosecha se desplomará”. Esta es la advertencia emitida por la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) en su informe sobre la región agrícola núcleo. La entidad alertó que en un lapso de siete días, el área bajo condiciones muy buenas a excelentes tuvo una caída importante, pasó del 90% al 65%. Este escenario se presenta en un momento delicado para la soja de primera, que se encuentra en la una fase sensible de definición de rendimiento, mientras enfrenta temperaturas máximas de hasta 38°C.
“Lo que no queríamos que pase está pasando; esta sorpresa, después de haber tenido condiciones tan buenas, estar ahora sin lluvias y con estas temperaturas altísimas en un momento tan sensible a todos nos pone muy nerviosos”, dice Cristian Russo, jefe de estimaciones de la BCR, en diálogo con LA NACION.
En ese sentido, indicó que hay “mucho temor porque, por al menos por una semana no se va a ver una mejora de fondo. Tal vez si empiezan a bajar las temperaturas, pero no se ve una solución a corto plazo”.
Frente a este escenario la entidad rosarina advirtió que la perspectiva “una gran campaña” empieza a “diluirse”. De manera que podría no cumplirse la proyección de que esta área coseche cinco veces más la producción del año pasado y alcance los 18,7 millones de toneladas como la entidad había estimado hasta hace una semana. A nivel nacional, la BCR calculó al 10 de enero, unos 142,2 millones de toneladas de cosecha total. Ahora ese número comenzó a revisarse.
Además de la preocupación por las inclemencias climáticas, alertaron que en el sector también hay preocupación por los márgenes económicos ajustados debido a costos de producción elevados y precios inferiores en comparación con los del año pasado.
“A pesar de una producción un 25% mayor, no se compensa la misma producción valorizada hace un año. Esto se atribuye a una estructura de costos elevada por alquileres, insumos y otros gastos, mientras que los precios se mantienen más bajos. Esta situación ha generado nerviosismo en el sector, especialmente en un escenario en el que todo cambió repentinamente de una semana a otra”, indicó Russo.
Condición
“La condición de soja de primera en la región núcleo sufre un revés importante. Del 90% de la soja bajo condiciones muy buenas a excelentes de la semana pasada, se pasó al 65% al día de hoy. Ahora hay lotes regulares y malos en un 10% del área de soja de primera, cuando una semana atrás no los había”, informó desde la BCR.
Mencionaron como ejemplo que en los partidos de Pergamino y Rojas se anticipa la posibilidad de aborto de flores y vainas en suelos pesados y overos, mientras que en El Trébol, la semana se presenta complicada para los cultivos en suelos de baja calidad, a partir de la clase II. En Carlos Pellegrini, se observa un freno en el desarrollo de la soja de primera.
Además, alertaron que también es “preocupante” la situación de soja de segunda y maíz tardío. En rigor, se repite el fuerte desmejoramiento en la condición de cuadros, especialmente en aquellos de inferior potencial productivo y los sembrados en las últimas fechas. “No tienen un desarrollo radicular suficiente para amortiguar la escasez de agua”, explicaron.
En el caso de los maíces tardíos, informan que el 30% de los cuadros se encuentra en pleno período crítico por lo que hay incertidumbre en cuanto a la viabilidad del polen y la sincronización floral. Sin embargo aún se conservan en estado excelente y muy bueno un 45% de los cuadros, un 50% en buen estado y solo un 5% en condiciones regulares.
En tanto para la soja de segunda, “se ha registrado una disminución del área bajo condiciones excelentes a muy buenas con respecto a la semana anterior, pasando de 65% a 48%. El resto se reparte en condiciones buenas para el 35% del área y en condiciones regulares a malas en el 17% del área”.
Aunque aclararon que sobre esta última categoría entraba el 5% del área hace sólo una semana. “Si bien el cultivo está fuera de la ventana crítica -el 100% de los cuadros están entre estado vegetativo y R3-, existe una creciente inquietud ante la posibilidad de pérdidas de plantas o incluso lotes completos, especialmente en áreas de baja aptitud agrícola”, detallan
Esta situación de baja precipitaciones y fuertes calores se da, según explicó el meteorólogo Alfredo Elorriaga, porque la conjunción de la posición del anticiclón permanente del Atlántico y el alto grado de radiación solar están potenciando el fuerte aumento de las temperaturas en toda la región pampeana.
“Por primera vez en mucho tiempo las condiciones de circulación de la escala regional están neutralizando por completo la influencia positiva del Niño. Reaparecen las áreas de sequía y todo parece indicar que la transición a febrero, por lo menos en su primera semana, no aportará cambios radicales. Por lo tanto, no hay una solución de fondo presente en los próximos 8 a 10 días, y recién entonces las altas temperaturas podrían gradualmente comenzar a ceder”, dijo.
En línea con las consideraciones presentadas por la BCR, YieldData, una empresa que emplea inteligencia artificial para anticipar los rendimientos agrícolas pasados y futuros, llevó a cabo un análisis utilizando técnicas avanzadas de Inteligencia Artificial. El estudio se centró en pronosticar el rendimiento de un cultivo de soja de primera en el Partido de Rojas, ubicado en la provincia de Buenos Aires.
La firma identificó que, en caso de que no se registren lluvias en los próximos 15 días, las pérdidas potenciales de rendimiento en un lote de soja podrían alcanzar el 19% hasta el 16 de febrero. El cultivo analizado fue sembrado el 12 de noviembre, con un nivel inicial de humedad del suelo del 90%. Los cálculos se basaron en datos históricos de los últimos 39 años, los cuales indicaban que, para el 21 de enero, se anticipaba un rendimiento superior al 18% en comparación con la media histórica.
Por otro lado, la Bolsa de Cereales de Buenos Aires (BCBA) alertó sobre la disminución de la condición hídrica de los cultivos debido a las escasas precipitaciones. Según la entidad, “las altas temperaturas registradas durante los días previos al presente informe, sumado a la falta de precipitaciones, han provocado una caída de 13 puntos porcentuales sobre los cuadros que presentaban una condición hídrica Óptima/ Adecuada. A su vez, la condición de cultivo Normal/Excelente registra una menor caída (6,5 puntos porcentuales), traccionada por los lotes sobre el Norte de La Pampa-Oeste de Buenos Aires, donde se han observado síntomas de estrés hídrico”.
No obstante, la BCBA aclaró que sobre ambos núcleos, más del 90% de los cuadros presenta una condición de cultivo Normal/Excelente. En este escenario, “el 14% de los lotes ya inició el periodo crítico, donde se harán necesarias precipitaciones para enfrentar la etapa de definición de rendimiento”, advierte la entidad. La incertidumbre persiste ante la necesidad de condiciones climáticas favorables para asegurar el desarrollo y rendimiento de los cultivos.
En cuanto al maíz grano comercial, informan que la siembra ha alcanzado el 98,4% del área estimada, pero se espera la necesidad de precipitaciones en el norte del país para completar las labores. “Las altas temperaturas provocan una caída de 15,4 p.p. en la condición hídrica Óptima/Adecuada, con los cultivos tempranos llenando grano y los cultivos tardíos entrando en su período crítico en el centro del área agrícola”, dijeron.
El informe también destacó la presencia significativa de enfermedades como Dalbulus maidis, la chicharrita vectora de Spiroplasma kunkelii, en varias regiones, lo que agrava la preocupación.
Fuente: Bolsa Comercio de Rosario