Cobra el que trabaja la láctea SanCor apura una estrategia para terminar con un largo conflicto gremial
La empresa, que registró medidas por parte de trabajadores nucleados en el sindicato Atilra, está produciendo 350.000 litros diarios y pudo sacar stocks
Enfrentando algunos resabios de las últimas disputas con la Asociación de Trabajadores de la Industria Lechera de la República Argentina (Atilra), que paralizaron la actividad (producción y ventas) durante 65 días y ocasionaron un perjuicio que la empresa estimó en algo más de $4500 millones, la láctea SanCor Cooperativas Unidas Limitadas (CUL), con sede en Sunchales, al oeste de esta provincia, se va reacomodando camino a una recuperación que se prevé para los próximos meses.
En la actualidad, procesa 350.000 litros de leche diarios, un mínimo estacional. Está al día con los pagos comprometidos oportunamente ante la Secretaría de Trabajo de la Nación que medió en el conflictos. Por lo tanto, la empresa lleva a la práctica una decisión que adoptó hace algunos meses: “cobra el obrero que trabaja”, según admitieron productores allegados a la conducción de la cooperativa.
“Actualmente, funcionan todas las plantas de manera normal. Hay pocas excepciones donde se registraron algunos planteos de los trabajadores. Y en Sunchales, donde está la casa central, la intervención policial dispuesta por el gobierno de la provincia mantiene el orden. En esta planta hubo algunos inconvenientes, ya que se denunciaron agresiones y desmanes de algunos trabajadores y dirigentes cercanos a la conducción del gremio. Pero hoy el panorama es un poco diferente, porque algunas actividades productivas se desarrollan normalmente. Incluso, se pudo sacar y enviar a góndolas, todo el stock de productos que había en existencia”, confirmó un encargado de turno.
“Hay que tener en cuenta que SanCor no tuvo producción de productos durante dos meses. Por lo tanto, es lógico que actualmente algunos segmentos de la cadena productiva y de comercialización estén recuperándose”, añadió.
“Creemos que de continuar este ritmo de entrega de leche y producción de los diversos productos, en pocas semanas se incrementará la distribución y, consecuentemente, la presencia de nuestros productos en las góndolas”, explicó.
Ante una consulta de este medio, se aclaró que no hubo reducción de trabajadores ya que “la cantidad de personal sigue igual”.
En tanto, el sector gremial expone otra visión de la situación que se vive en las plantas de la cooperativa. Alejandro Cabrera, uno de los referentes de los trabajadores de la planta de Sunchales, aclaró que si bien algunos obreros trabajan, hay otros que hacen retención del crédito laboral “porque hace siete años que no percibimos en tiempo y forma nuestros salarios”.
“Los trabajadores se encuentran realizando una retención del débito laboral, que es una herramienta que tenemos los trabajadores cuando no se cumple el núcleo elemental del contrato de trabajo que es el pago de la totalidad de los sueldos”, remarcó.
Debe recordarse que el sindicato de los trabajadores de este sector, Atilra, denunció que con la presencia de efectivos de seguridad en la planta de Sunchales que ordenó el ejecutivo santafecino “la fábrica quedó literalmente militarizada por fuerzas policiales y parapoliciales enviados para reprimir la protesta de sus trabajadores que reclaman el pago de sus haberes y los aportes jubilatorios”.
Por ahora, las escaramuzas gremiales se mantienen, al igual que la producción continúa recuperando sus niveles de actividad.
Fuente: Diario La Nación