Ante un mes clave el intrincado combo que puso en suspenso al mercado de insumos del agro y las chances sobre una reactivación
En medio de la baja de los precios de los granos, la incertidumbre sobre el clima y las expectativas en torno de la reducción del impuesto PAIS, los productores tienen demoradas las compras de productos, según alertaron en el sector
A un mes de la siembra de maíz y a dos de la de soja, el mercado de insumos agropecuarios está ralentizado. Las empresas proveedoras reportan un retraso en las ventas del 20% al 30%, en comparación con años anteriores, con algunos operadores que estiman cifras aún mayores. Esta situación la atribuyen a una combinación de factores: la incertidumbre climática por la falta de lluvias, la baja en las cotizaciones de los granos, que desincentiva a los productores a vender grano para comprar insumos, y la posible reducción del impuesto PAIS, que dilata las decisiones de compra.
“El mercado está parado principalmente por dos razones: la preocupante falta de agua y la baja en las cotizaciones de los granos, lo que desincentiva al productor a vender para adquirir insumos. También está la posible eliminación del impuesto PAIS, que afectaría las cotizaciones. Es como si nadie quisiera hacer un movimiento en falso”, sostuvo Diego Napolitano, presidente de la Cámara Empresaria de Distribuidores de Agroquímicos, Semillas y Afines Bonaerense (Cedasaba), en diálogo con LA NACION.
Según aseguró, la facturación actual de los distribuidores esta entre un 25% y un 30% de lo esperado para esta época del año. “En algunos comercios están mucho más abajo de eso, lo cual representa una caída no solo en las ventas, sino también en la rentabilidad, y esto es más que preocupante”, explicó. Hay lugares incluso con un 15% de lo que se esperaría de facturación para este momento.
El presidente de Cedasaba detalló que, en los últimos dos meses, hubo un pico en la venta de insumos cuando el trigo alcanzó su precio máximo. “Después el precio comenzó a bajar y con él las ventas de insumos, además de que se cortaron las lluvias”, comentó. Además, la eliminación de aranceles a la urea y mezclas con nitrato de amonio ha generado una pausa en las ventas hasta que estos cambios se reflejen en los precios. “Inmediatamente, después, se habló de una posible baja del impuesto PAIS, lo cual ralentizó las ventas, ya que podría afectar positivamente el valor de los fertilizantes, haciéndolos más baratos para el productor”, indicó Napolitano. En tanto, el impacto en los fitosanitarios es relativo, ya que el impuesto PAIS se aplica sobre el valor de importación. “Si se importa un grado técnico, que luego se formula, el impacto es diferente a cuando se importa el producto terminado. Actualmente, no se está importando tanto producto formulado”, explicó.
“Hoy tenés a nuestro cliente, que es el productor, sin ninguna amenaza ni incentivo para la compra de insumos. Por amenaza me refiero a un aumento de los mismos, y por incentivo a que la presión fiscal tan abrumadora lo obliga a ser muy cauto y no comprar absolutamente nada, inclusive esperando una baja del impuesto PAIS”, señaló Napolitano.
Armando Allinghi, director ejecutivo de la Cámara de la Industria Argentina de Fertilizantes y Agroquímicos (CIAFA), explicó que la oferta de insumos está limitada por las expectativas de modificación del impuesto PAIS, que podría bajar del 17,5% al 7,5%. “Con relación a estos 10 puntos porcentuales de modificación, se trasladará a precio en la medida que las empresas importadoras vayan nacionalizando con la nueva alícuota y dependerá de la proporción del componente importado. Esta situación está demorando la toma de decisiones del productor y los distribuidores con lo cual los importadores retrasaron las compras y esto podría generar un atraso en la logística demorando el reabastecimiento”, dijo. Allinghi estimó un retraso del 20% en las ventas de fertilizantes.
Federico Landgraf, director ejecutivo de la Cámara de Sanidad Agropecuaria y Fertilizantes (Casafe), coincidió en que el mercado actual presenta cierto retraso, principalmente por razones climáticas: “Este mercado está algo más normalizado en comparación con los últimos dos o tres años. El año pasado enfrentábamos severas restricciones a las importaciones, lo que distorsionó el mercado. Actualmente el mercado muestra un comportamiento más normal. Las decisiones de inversión de los productores están más alineadas con factores agronómicos y climáticos, a diferencia de años anteriores, cuando estaban influenciadas por consideraciones financieras más distorsionadas”.
Landgraf advirtió que, si el retraso se extiende, se deberán tomar medidas para evitar cuellos de botella. “Si el canal no está completamente abastecido y muchos productores deciden actuar al mismo tiempo, será fundamental asegurar un suministro fluido para evitar problemas de abastecimiento y garantizar la continuidad del flujo de insumos”, comentó.
El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) emitió una alerta en X en donde aseguraba: “La sequía se expande en Argentina”. Indicó que “en los últimos tres meses, debido a la falta de lluvia, se agravó la situación en la zona núcleo”.SMN
Por otro lado, Hernán Busch, gerente de agronegocios de Banco Galicia, indicó que en los últimos días se ha observado un aumento en el ritmo de ventas respecto a principios de julio. “El balance de julio resultó ser mejor de lo anticipado y, al hablar con algunos proveedores de insumos, confirmaron que también notaron una actividad mayor. Actualmente, la ventana para tomar decisiones se está reduciendo y se esperan lluvias en los próximos días, lo que hace crucial contar con los insumos necesarios”, dijo.
Agregó: “Entendemos que agosto será un mes clave para la activación de la compra de insumos. Muchos estaban esperando señales del Gobierno y anuncios, que ya se han clarificado. Por lo tanto, es necesario comenzar a tomar decisiones, ya que el momento de la siembra no puede esperar. Además, el clima juega un papel importante; la sequía impide definir con precisión las áreas destinadas al cultivo de maíz, soja y otros productos”.
Según Busch, se prevé que, con las próximas lluvias, la actividad se reactive y para mediados de agosto comience a normalizarse. “Por otro lado, los bancos han mostrado que la capacidad de financiamiento está más que disponible”, concluyó.
Fuente: Diario La Nación