El impacto de contar con una certificación en los agrodepósitos
Recientemente, IRAM y CIAFA organizaron un webinar donde compartieron las características y ventajas de su certificación conjunta para depósitos de empresas agropecuarias.
En la presentación se hizo una introducción al protocolo IRAM-CIAFA, entendiéndose como un servicio que tiene una mirada integral, ya que toma en cuenta tanto los aspectos edilicios como cuestiones de seguridad, la prevención de accidentes y la capacitación del personal.
Las entidades y las firmas relacionadas con la agroindustria, desde las elaboradoras de productos químicos para el agro, fertilizantes, distribuidoras, importadoras y cooperativas agropecuarias invierten cada vez más para una mejor calidad, mayor seguridad y un menor impacto ambiental en respuesta, también, a sus compromisos respecto de la responsabilidad empresarial.
Desde la Cámara motivamos a que nuestros socios implementen la certificación IRAM-CIAFA en sus depósitos porque consideramos que representa un diferencial para las empresas. Contar con el respaldo de un organismo de prestigio como el IRAM, así como también con todo su apoyo técnico durante este proceso, es un gran valor agregado para nuestra industria”, comentó Armando Allinghi, director ejecutivo de Cámara de la Industria Argentina de Fertilizantes y Agroquímicos (CIAFA). “Esto no es solo para decir que certifiqué, sino que lo que verdaderamente importa es potenciar la calidad y seguridad del trabajo diario. Ahí es donde debemos hacer foco”, dijo el Ing. Agr. Federico Christen, del Instituto Argentino de Normalización y Certificación (IRAM).
El especialista fue uno de los oradores del webinar organizado por ambas entidades para difundir el “Depósito Certificado”, que apunta a favorecer la calidad del servicio con el establecimiento de protocolos específicos para el almacenamiento de fertilizantes y fitosanitarios.
“Existen normas y protocolos obligatorios, pero la mayoría son voluntarios. Por eso es interesante, además de cumplir con las exigencias, encontrar nuevos beneficios y bondades a partir de la implementación y certificación la norma”, explicó Christen. Luego señaló: “esta certificación brinda valor agregado. Me ordena, manejo mejor los stocks, logro que el personal esté más capacitado, tengo menos accidentes y evito que salga mercadería por error”.
Las partes interesadas en la certificación de productos son los proveedores, para distinguir sus productos de aquellos no certificados; los consumidores, a fin de disponer de un medio que les permita confiar en los productos que adquieren; y las autoridades reguladoras, en el sentido de vigilar el cumplimiento sobre las disposiciones legales de las que son responsables como protectoras de la salud y de la seguridad públicas.
En primera persona
Estuvo en la jornada virtual, Edgardo Peirone, de Trenque Lauquen y socio de CIAFA, quien concretó en 2015 el primer depósito certificado. Y, a partir de esa experiencia, en 2018 certificó la norma ISO 9001.
“Cuando trabajamos con el asesor de seguridad e higiene nos pusimos al día con una serie de herramientas de las cuales no estábamos al tanto en cuanto a especificaciones, desde el uso de la energía eléctrica hasta derrames y demás circunstancias. Lo que pasa es que uno, en el día a día y como siempre anda detrás de otras cosas, no lo advierte. Por eso siempre digo que los protocolos nos organizaron de manera definitiva”, explicó.
Peirone sostuvo que “desde entonces aprecio que todo el personal se va ajustando. Nunca nos pasó nada, por suerte, pero en definitiva lo que estamos tratando de evitar es que haya algún accidente y eso, hoy, creo que es invalorable; no tiene precio”.
“Hay cosas simples y sencillas que nos organizan para que nada ocurra. Por ejemplo, valoro mucho el seguimiento de la parte mecánica de los autoelevadores. A veces uno se olvida y no sabe ni cuántas horas tiene ni cuando se deben hacer los cambios de aceite y demás. A veces estoy muy alejado de estos temas y no siempre le damos importancia, pero son relevantes”, concluyó Peirone.
Resumiendo, las ventajas de implementar y certificar estos protocolos encontramos:
•La demostración del control sobre los procesos.
Mayor eficiencia en la utilización de recursos.
La reducción de la siniestralidad.
La importancia de que sea una evaluación hecha por una tercera parte.
La mejora en el valor agregado para la empresa.
La motivación en la búsqueda de la mejora continua.
Ser vanguardistas en la excelencia profesional.
Fuente: CIAFA