Aluvión el maíz volvió a las rutas y fue histórico el ingreso de camiones a los puertos del Gran Rosario
Según la Bolsa de Comercio de Rosario, la semana pasada entraron unas 136.000 toneladas; el segundo registro en importancia de la historia; en tanto, la comercialización sigue 12 puntos porcentuales por debajo del promedio

Después del retraso que mostró la comercialización del maíz de la nueva campaña, en gran parte por las lluvias intensas y los caminos intransitables, el ingreso de camiones al Gran Rosario alcanzó un récord histórico. La Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) informó que, durante la última semana, se registró el segundo ingreso de camiones de maíz más importante de la historia para el período semanal: cerca de 4850 vehículos por día, que en total trasladaron unas 136.000 toneladas hacia los puertos del área. Este nivel de actividad no se registraba desde 2019, cuando el promedio diario superó los 5000 camiones.
El dato surge del informe semanal sobre el mercado de granos que realiza la BCR, donde fue entrevistado Matías Contardi, integrante de la Dirección de Informes y Estudios Económicos de la entidad. “Al inicio de marzo, los ingresos de camiones se mantenían bajos, sobre todo por las dificultades para acceder a los campos debido a las lluvias. Pero la situación cambió por completo”, explicó Contardi. “Se sintió el impacto del maíz temprano y, la semana pasada, observamos el segundo [registro en importancia] ingreso de camiones al Gran Rosario. Fueron 136.000 toneladas”, agregó.
Este repunte contrasta con el rezago que aún muestra la comercialización del cereal. “Estamos con cierto retraso frente a campañas anteriores”, señaló Contardi. Según la BCR, el avance de ventas del maíz alcanza apenas el 21%, de las 44,5 millones de toneladas de producción estimada, cuando el promedio de los últimos cinco años para esta altura del ciclo es del 33%. Esto representa una brecha de cinco puntos porcentuales por debajo del año pasado y doce puntos porcentuales por debajo del promedio de los últimos cinco ciclos.
A pesar de este panorama, desde la BCR destacaron un aspecto positivo: esta campaña muestra una proporción mayor de negocios en firme respecto de la anterior, algo que se vincula con precios más atractivos y una fuerte demanda externa.
“La proporción de negocios en firme supera en 10 puntos porcentuales a la campaña pasada”, precisó Contardi, quien atribuyó ese crecimiento a “los buenos precios registrados en los últimos meses y al récord de embarques”
Sobre el volumen total de granos, Contardi recordó que, hacia fines del año pasado, la Bolsa rosarina estimaba una cosecha total de granos de 143 millones de toneladas. Sin embargo, las inclemencias climáticas modificaron ese escenario.
“Lluvias a destiempo, calor intenso en enero y falta de agua en febrero afectaron severamente la producción”, indicó. Actualmente, la proyección se ubica en 127 millones de toneladas, con un ingreso de divisas por exportaciones del agro estimado en 30.800 millones de dólares, una cifra similar a la del año anterior.
En el caso del maíz, la producción se vio afectada por el impacto de la plaga de la chicharrita, que afectó principalmente los lotes de siembra temprana. A eso se sumó una caída del 22% en la superficie sembrada en la región centro. Como resultado, la proyección de cosecha se ajustó a 44,5 millones de toneladas, lejos del potencial inicial de entre 52 y 53 millones.
Otro tema destacado en el informe fue el trigo. La actual campaña muestra una de las mayores ofertas de la historia, con más de 23 millones de toneladas disponibles, resultado de una producción estimada en 19 millones y un stock de arrastre que supera los 4 millones.
Sin embargo, las exportaciones no avanzan al ritmo esperado. “Llevamos exportadas unas seis millones de toneladas. Es el volumen más alto en los últimos tres años, pero en términos relativos estamos muy por debajo de lo proyectado”, explicó Contardi. La campaña prevé exportaciones por 12,8 millones de toneladas, pero el avance apenas llega al 46%. A esta altura, el nivel ideal rondaría el 60%.
El futuro dependerá de la aparición de la demanda externa. Si eso ocurre, el trigo argentino podría ganar terreno en el mercado internacional, especialmente antes de la llegada de la cosecha del hemisferio norte. Si no se concreta esa demanda, Contardi advirtió que el exceso de oferta podría ejercer presión sobre los precios internos.
El especialista también se refirió al contexto internacional, donde volvió a destacarse la tensión en torno al comercio marítimo. El gobierno de Estados Unidos evalúa una reglamentación que impondría aranceles de hasta 1,5 millones de dólares a buques con bandera o fabricación china.
“Todavía se encuentra en etapa de consulta pública, pero el mercado ya lo descuenta en los precios”, advirtió Contardi. “Esto podría encarecer fuertemente el transporte y afectar la competitividad del grano estadounidense. Algunos estudios estiman un aumento del 50% al 90% en el costo por tonelada”, detalló.
Según señaló, ya existen exportadores en Estados Unidos que no consiguen barcos para despachar mercadería más allá del mes de mayo. La incertidumbre reina en los mercados globales.