Recrudeció un conflicto una empresa láctea tiene tres plantas paradas y 438 empleos están en riesgo
Sigue complicándose la situación de la industria láctea Verónica, con plantas en Lehmann, Suardi y Totoras, en el interior de esta provincia. Desde la semana pasada no hay producción ni ventas de productos de la marca, lo que pone en riesgo 438 puestos de trabajo.

Uno de los dueños de la empresa anunció ante los trabajadores que “los sueldos se pagarán, pero en cuotas”, lo que no garantiza el normal desenvolvimiento de la firma.
Una protesta laboral, que ya se venía cumpliendo en dichas plantas, se intensificó este lunes, ya que continúa sin completarse el pago de los sueldos de abril, que fueron abonados en cuotas y de forma parcial.
Según información del gremio, hasta el momento los 438 empleados de la compañía cobraron solo un 54% del salario correspondiente al mes pasado, y en tramos que incluyeron porcentajes mínimos, del 5%.
El viernes pasado, en una audiencia de partes convocada en la sede de la Secretaría de Trabajo de la Nación, los representantes de Verónica admitieron “la posibilidad” de completar ese pago antes del 11 de junio, pero no brindaron precisiones sobre el pago de mayo ni del aguinaldo.
“Los empresarios no dan la cara, es indignante”, alegó Rodolfo Rodríguez, delegado de la planta de Totoras, cercana a Clason, en el extremo sur de esta provincia.
El dirigente apuntó contra la familia Espiñeira, dueña de la firma, por proponer “trabajar para ver si se junta el dinero”, en lugar de plantear una solución real. “La respuesta de los trabajadores fue tajante: exigieron que la empresa tome un crédito para afrontar salarios, deudas con proveedores y adquisición de insumos”, subrayó.
Por su parte, en diálogo con LA NACION, el ministro de Trabajo de Santa Fe, Roald Báscolo, explicó que “el viernes pasado la empresa hizo una propuesta en la audiencia (en el Ministerio de Trabajo de la Nación) que no fue aceptada por el gremio. Hay un impasse, porque la idea es que dicha propuesta sea superadora y lo antes posible”.
Ante otra consulta, Báscolo señaló que la situación “no es resolver solamente la cuestión laboral. A la par tiene que recuperar la confianza de los tamberos”, algo que “se verifica con los litros de leche que fue perdiendo en estos últimos meses”.
También confirmó que uno de los empresarios recorrió la semana pasada las tres plantas radicadas en esta provincia, interiorizándose de lo que ocurre en la empresa.
La versión que recogió este diario es que a Verónica le falta capital de trabajo para continuar operando en el complicado mercado lácteo argentino del momento. Según Báscolo, la firma “no estaría sobreendeudada”, por lo cual un aporte financiero permitiría superar la coyuntura. Esto significa que, al menos por el momento, Verónica no estaría buscando el aporte de capitales externos a la firma.
Actualmente la planta de Suardi se mantiene operativa porque elabora leche en polvo a fasón, es decir, para empresas que no tienen las instalaciones adecuadas. A ello agrega suero en polvo para la empresa Arla Foods de Porteña (Córdoba).
En esa planta se elabora queso blando y muzzarella, además de leche en polvo, producto del procesamiento de unos 120.000 litros diarios de leche, muy lejos de aquellos 500.000 litros de hace una década.
La situación de Verónica no es nueva. Según explicaron referentes gremiales, la crisis de la láctea comenzó en 2017. Durante la pandemia la firma llegó a procesar un millón de litros diarios de leche y logró ponerse al día con los sueldos, pero luego volvió a caer. Desde hace dos años la producción y la compra de insumos se redujeron drásticamente.
Fuente: Diario La Nación