Cómo cerrar la brecha de rendimiento agrícola claves de la fertilización eficiente según expertos en Aapresid
En el Congreso Aapresid, la Asociación Civil Fertilizar puso sobre la mesa un tema central para el futuro de la producción agrícola: la nutrición de cultivos como herramienta para achicar la brecha de rendimiento. A través de dos talleres, especialistas nacionales presentaron evidencia y estrategias para potenciar la eficiencia de la fertilización y sostener la productividad en el tiempo.

El Dr. Martín Díaz Zorita (UNLPam) explicó cómo las decisiones sobre dosis, momento, fuente y lugar de aplicación de fertilizantes impactan directamente en los resultados. Subrayó la importancia de integrar nutrientes clave y evaluar su diagnóstico en rotaciones como trigo–soja de segunda, mostrando escenarios posibles para acortar la distancia entre el rendimiento actual y el potencial.
Por su parte, el Dr. Esteban Ciarlo (Fertilizar AC) presentó datos de la red de ensayos de largo plazo de la institución. Los resultados confirman que sumar nutrientes como azufre y zinc puede elevar los rindes en hasta un 20% respecto de las prácticas habituales. “No fertilizar es la peor alternativa: las pérdidas pueden superar el 18% y el deterioro del suelo se profundiza con los años”, advirtió el especialista. La moderación estuvo a cargo de la Ing. Agr. María Fernanda González Sanjuan, gerenta ejecutiva de Fertilizar AC.
En paralelo, otro panel analizó cómo la agriculturización está transformando los suelos. Los investigadores Nicolás Wingard y Nahuel Reusi Calvo (UNMdP) presentaron, junto al INTA, un mapa de disponibilidad de nutrientes que revela caídas sostenidas en fósforo, bases y micronutrientes como zinc y boro, además de bajos niveles estables de materia orgánica. “Los contenidos se acercan peligrosamente a los umbrales mínimos de suficiencia”, advirtieron, señalando la necesidad de fertilizaciones más completas y actualizadas.
La MSc. Carolina Troglia (INTA Balcarce), quien moderó el panel, remarcó la importancia de análisis de suelos y de indicadores precisos para diseñar planes de nutrición integrales. En un escenario global de demanda creciente de alimentos, cerrar la brecha de nutrientes es una de las claves para sostener la productividad y la salud del suelo en el largo plazo.