Energía transformadora. El Congreso CREA comenzó con un fuerte mensaje: trabajar más allá del campo
Desde temprano, el movimiento en Tecnópolis anticipaba la magnitud del Congreso CREA: filas en los accesos, acreditaciones a toda marcha, pantallas gigantes encendidas y un escenario iluminado de verde enmarcaban la llegada de productores, técnicos, empresarios, estudiantes y jóvenes de todo el país.

A las 10, con el auditorio colmado, quedó inaugurada oficialmente esta nueva edición, que durante dos jornadas reunirá a unas 8000 personas y se consolidará como un punto de referencia para el agro argentino.
En la apertura, el presidente de CREA, Fernando de Nevares, convocó a los asistentes a asumir “una energía transformadora para transformar al agro y también a la Argentina” y, en línea con el lema “Viví la energía transformadora”, destacó que el encuentro trasciende lo productivo para abrir un espacio de reflexión sobre el rol del campo en la sociedad.
Tecnópolis se convirtió en un punto de encuentro nacional para el sector agropecuario. Llegaron productores y técnicos del norte, el litoral, la región pampeana, Cuyo y la Patagonia. La agenda incluye conferencias sobre tecnología y sustentabilidad, debates sobre el rol de los jóvenes en el futuro del agro y reflexiones en torno a los desafíos de la Argentina federal.
Desde la organización destacaron que la magnitud de la convocatoria quedó reflejada en los números: 8000 anotados, 84 empresas acompañaron con sus marcas, más de 450 estudiantes secundarios participan junto a sus docentes y unos 1000 jóvenes diseñaron su propia agenda de charlas y actividades.
““CREA es movimiento porque estamos en permanente evolución. El cambio es el pulso de lo vivo, y en CREA late fuerte. Miles de personas conectadas, que con generosidad interesada buscan la mejora continua, tienen una enorme potencia de transformación” , afirmó frente al auditorio colmado. En esa línea explicó que la transformación alcanza a las empresas, los equipos de trabajo, las comunidades y, en definitiva, a la Argentina.
También resaltó la coherencia que tuvieron los Congresos CREA a lo largo de los años, con lemas que fueron marcando un mismo hilo conceptual. “Ampliamos el campo de nuestra mirada, revolucionamos nuestras empresas y nuestro ADN entra en acción para que el campo trabaje más allá del campo. Todos juntos construyendo nación, somos parte de una Argentina posible” , remarcó.
El titular de la entidad describió al Congreso como un punto de encuentro que permite pensar colectivamente más allá de los dos días de actividades. “El congreso nos permite reunirnos y abrazarnos, es el reencuentro de la red que nos saca de la rutina y nos dispone a pensar juntos con horizonte común. Son hitos en la construcción de nuestra estrategia y de nuestra identidad. Hablar es pensar en voz alta. Ninguna de las charlas que escuchemos hoy y mañana buscará cerrar ideas, sino abrir preguntas”, sostuvo.
En ese sentido, subrayó que las conversaciones que se dan en este espacio se convierten en plataforma para nuevas ideas. “Si escuchamos juntos, pensamos juntos. Y si luego conversamos, empezamos a cambiar juntos y a generar el impacto que buscamos”, dijo.
Destacó que la red CREA tiene la capacidad de generar alianzas y de proyectar su modo de trabajo en una escala mayor: “Lo que hacemos hace casi 70 años en los grupos es perfectamente replicable en una red mucho más extensa. Compartir experiencias y conocimientos nos dispone a crecer también”, afirmó.
En el tramo final de su discurso, insistió en la diferencia entre cambio y transformación: “Hablo de transformar y no de cambiar, porque el cambio lo entendemos como un modo de hacer las cosas diferentes. Cuando digo transformar, me refiero a ser distintos. Un salto de conciencia que nos lleva a otro plano de nuestras acciones. Y si nos transformamos, transformamos la Argentina” , expresó.
Finalmente, convocó a salir de la comodidad y asumir el desafío de construir un país posible. “Creemos en una Argentina donde toda persona pueda desarrollar su vida plena en la comunidad que elija como propia. Para esto, las comunidades deben ofrecer la oportunidad de desplegar talentos y llevar desarrollo a cada región del país. Los invitamos a sumar nuestra iniciativa, aunque esto signifique salir de la zona de comodidad. Afuera de la zona de confort está la oportunidad de aprender, de crecer y de conocer lo bueno”, concluyó.
Tras su discurso tomó la palabra el presidente del Congreso, Álvaro Tomás. “El congreso lo pensamos para que cada uno viva, se sienta y sea parte de la energía que CREA genera y transmite”, afirmó.
Explicó que la dinámica está organizada en cuatro bloques plenarios —dos el jueves y dos el viernes— junto con un espacio de conexiones y un espacio de esparcimiento. En el auditorio, señaló, se escucharán charlas de referentes que buscan inspirar, compartir conceptos y generar un vocabulario común que permita imaginar distintos escenarios de futuro.
Sobre el espacio de conexiones subrayó que habrá decenas de charlas breves e interactivas: "No los invitamos a ser simples espectadores, sino protagonistas. Queremos que participen, que aporten preguntas y que compartan experiencias, tal como ocurre en las reuniones CREA en el campo“.
Respecto al espacio de esparcimiento, agregó que los asistentes podrán disfrutar de propuestas gastronómicas, lugares de encuentro, música y actividades recreativas: “También es parte de la experiencia que queremos que se lleven de estos dos días".
“Este congreso será recordado cuando, al volver a casa, se diga ‘qué bueno que vinimos’; cuando dentro de un año alguien aplique una herramienta aprendida aquí; y cuando dentro de tres años se anuncie el próximo Congreso CREA y todos digamos ‘allí estaremos’”, dijo.
Fuente: Diario La Nación