SOJA: CÓMO CONSEGUIR LOS ALTOS PRECIOS DE CHICAGO ZAFANDO DEL CEPO AL DÓLAR
Surgen alternativas de inversión y rentabilidad en un mercado cada vez más profesional. En esa línea, en la cumbre de acopiadores concluyeron que “el negocio del acopio debe complejizarse para ser rentable”.
La soja cotiza en Chicago, el mercado de futuros referente a nivel mundial, a unos u$s 500 la tonelada, mientras que en las Bolsas de Argentina lo hace hoy en torno a los u$s 330 la tonelada.
En la actualidad, un puñado de casas de corretaje argentinas opera en los mercados de futuro de Chicago haciendo coberturas, movimientos especulativos y arbitrajes para poder ofrecer a sus comitentes un precio de la soja superior al promedio. Todos estos movimientos hoy están complicados por las restricciones al movimiento de dólares que implementó el gobierno nacional
Pero ahora, el Mercado a Término de Buenos Aires (Matba), en alianza con el Chicago Mercantile Exchange (CME), empezará a operar a partir de la primera quincena del me que viene una nueva familia de contrato de futuros que reflejarán en el país los precios de la plaza estadounidense sin tener que sacar la plata fuera del país y que fueron bautizados “Soja CME”, “Maíz CME” y “Trigo CME”.
Este contrato está pensado para que operadores y productores que no tienen acceso a los precios de Chicago puedan hacerlo, pero a menores costos porque, por ejemplo, al hacerlo con el nuevo contrato no hay que cumplir con las garantías y depósitos que se exigen para tener una cuenta en Estados Unidos.
En rigor, estas coberturas –que permiten obtener mejores precios pero que no evitan el impacto fiscal de las retenciones- habían sido anunciadas a mediados del año pasado, pero según informaron ayer desde el Matba la “Soja Chicago” empezará a operar primero y, asentado el nuevo producto, en el transcurso del año debutarán el resto de los contratos.
Por el lado, del Mercado a Término de Rosario (Rofex) también había anunciado en paralelo al Matba un contrato propio de Soja Chicago, en este caso pensado más para el inversor minorista, que empezó a cotizar ya desde diciembre pasado con muy buena performance.
Desembarco en Rosario
Precisamente, el presidente del Matba, Ricardo Valderrama, junto a la gerente general de la entidad, Viviana Ferrari, y a la gerente de la oficina Rosario, Gabriela Fasciano, presentaron ayer en la ciudad las novedades en una reunión a la que asistieron ejecutivos de casas de corretaje de la ciudad y el presidente del Centro de Corredores de Rosario, Gino Moretto.
“Nos pareció conveniente es replicar los contratos, que operarán con un valor de mercado que lo fija en valor de Buenos Aires, pero cuando termina la rueda liquidará con el ajuste de la posición que cotizó en Chicago. Cotizará diariamente con un valor que puede ser igual, superior o inferior a Chicago, pero al momento de ajuste como es índice y no tiene entrega, va a liquidar contra valor Chicago y ahí está la diferencia de precios que puede obtener el operador”, explicó Valderrama en diálogo con punto biz.
Según explicó Fasciano, el contrato de futuro de Soja tendrá un tamaño de 136 toneladas, se negociará en dólares solamente en plataforma electrónica, los meses de contratación serán enero, marzo, mayo, julio, agosto, septiembre y noviembre, y la forma de liquidación será sin entrega física liquidando por diferencias de precios según el ajuste final del CME Group.
En rigor, la ventaja de este contrato es que se trata de otra alternativa que permite diversificar la cartera, realizar arbitrajes contra el resto de los contratos del Matba, facilita el arbitraje entre el contrato operado en Argentina y el operador en Chicago porque replica en forma exacta el contato del CME Group, tiene menor costo financiero ya que las posiciones de Soja Chicago se compensarán con las demás posiciones abiertas de soja.
“Buscamos brindarle a los operadores una nueva herramienta comercial de ágil realización. La idea era darle comodidad del operador para el movimiento financiero contínuo. Es un contrato pensado tanto para operadores chicos, medianos y grandes. Además, ayuda al manejo financiero de los operadores compensando posiciones que tengan en este índice con el contrato de “Soja con entrega” que ya tenemos”, explicó a punto biz Valderrama. “También da la posibilidad de que si tenes una pata en una zona Buenos Aires y Chicago puedas compensar garantías y terminar poniendo menos garantías, entonces podes operar mayor nivel de contratos con el mismo dinero”, agregó.
“¿Qué le aporta al Matba? El volumen. No sólo del nuevo contrato, sino el arrastre a todos los contratos de soja. En trigo y maíz, lo vemos como alternativa de cobertura a valores más similares a los del mercado internacional sin tantos descuentos. Y al comprador o trader le sirve porque asegura cobertura de precio. También a todos los actores les da agilidad financiera y de menos capital inmobilizado”, resaltó.
¿Un contado con liqui?
Uno de los puntos fuertes del contrato es que puede reflejar los valores de del exterior pero evitando las dificultades ocasionadas por la restricción en los giros de divisas al exterior, más en un momento del cepo cambiario.
“Por las normativas cambiarias y restricciones que hoy hay para el giro de divisas, éste contrato permite cubrirse con valores internacionales sin tener inconvenientes operativos”, contó el presidente del Matba.
Este contrato, vale aclarar, no es una figura asimilable al “contado con liqui” tan popular en el mundo financiero que permite sacar los dólares del país al comprar en argentina títulos valores en dólares que se venden luego en Nueva York. Por el contrario, en este caso lo que permite es obtener un rendimiento en la comparación de precios entre argentina y Chicago (arbitrando al liquidar el contrato Soja CME con el Soja con Entrega) a menor costo que operar en Estados Unidos.
Más allá de esto, en materia de tendencias de negocios, lo cierto es que estas nuevas alternativas del Rofex y Matba viene a seguir consolidando la tendencia de que mercados de futuro que muestran precios por los granos frente a los que se consiguen en el disponible.
Fuente: Mariano Galíndez, Punto Biz.