Trigo: "En el año 2001 sembramos exactamente el doble que este año"
Domingo Capeloni, presidente de AAPROTRIGO explica la necesidad de la "convivencia" entre la producción de productos primarios y la industria.
Realizamos un relevamiento en todo el país que empezó en Orán y término en Mar del Plata, llevó 5 años de trabajo. Este relevamiento incluía la visita a los molinos harineros de los semilleros multiplicadores y los comercios expendedores que en definitiva asesoraban al productor en la toma de decisiones; esto me permitió conocer a Argentina con las distintas realidades que tiene, y son muy diferentes. La función de esta Asociación es llevar a cabo los requerimientos de las distintas realidades del país y distintas necesidades del productor.
Por ejemplo si se cerraran las fronteras de exportación en Orán, un productor de la zona para llevar su trigo a una industria nacional debe pagar un flete a 1200 km de los molinos más cercanos, que distinta es la realidad que tiene el productor de Orán con respecto al de Necochea, o el que siembra trigo en la Pcia. de Córdoba donde es la segunda provincia en números de molienda; hay distintas realidades.
La falta de previsibilidad es la falta de un programa a largo plazo para los próximos 10 años, que es lo que AAPROTRIGO está intentando crear.
Hay algo de Argentina que no estamos aprovechando que son los ambientes que nos permiten fabricar productos de diferentes calidades para atender distintas necesidades. La calidad es atender los requerimientos de la demanda. Se escucha decir "Poner valor agregado", podemos poner valor agregado en función de retroceder la superficie de siembra?
En el año 2001 sembramos exactamente el doble que esta campaña, cuando el mundo está en crecimiento ¿Cuál es la excusa, el mensaje? ¿Preservar la mesa de los argentinos?
En Argentina la industria molinera no tiene capacidad para moler la capacidad que tiene para producir, tenemos una industria molinera obsoleta no estamos actualizados con respecto a otros países, aparte los procesos industriales son mucho más lentos en incrementarlos que los procesos de productos primarios.
Si nosotros ponemos condiciones al productor le decimos que están los registros de exportación abiertos y se puede comercializar libremente Argentina está en condiciones de producir 10/15millones más de toneladas pero industrialmente Argentina no está en condiciones de procesar el incremento como puede ser en el producto primario.
Con respecto a la comercialización internacional Capeloni agrego: "Argentina tiene un único nomenclador de exportación que es para trigo forrajero, lo que necesitamos es crear distintos tipos de nomencladores de exportación para diferenciarlos en la comercialización el trigo Premium, los productos especiales, los requerimientos, etc".
Argentina tiene que crecer: Los mercados de producir productos primarios e industrializar tienen que convivir porque tenemos más capacidad productiva que capacidad industrial.-concluyó.
Fuente: Cuenca Rural.