Siguen buscando sin tregua a once desaparecidos en el lugar del estallido
La cantidad de muertos por la explosión tras un escape de gas registrada el martes pasado en el edificio de Salta 2141, el peor desastre en la historia de Rosario, ascendió ayer a diez.
La cantidad de muertos por la explosión tras un escape de gas registrada el martes pasado en el edificio de Salta 2141, el peor desastre en la historia de Rosario, ascendió ayer a diez. Sumando maquinaria de gran porte, los rescatistas continuaban buscando, al cierre de esta edición de La Capital, a once personas en el lugar, mientras que trece permanecían internadas (una de ellas en estado muy delicado). Por su parte, los gobiernos nacional, provincial y municipal acordaron otorgar créditos hipotecarios a los damnificados, luego de que la presidenta Cristina Kirchner (quien dispuso duelo en todo el país por dos días) recorriera el epicentro de la catástrofe y un sanatorio, en el marco de una breve y sorpresiva visita a la ciudad. Paralelamente, los dos detenidos por el hecho, un gasista y su asistente, fueron indagados en Tribunales en una causa por estrago culposo. El Papa Francisco, a su vez, hizo llegar su mensaje de solidaridad con las víctimas y pidió por el "eterno descanso" de los fallecidos.
La intendenta Mónica Fein reafirmó que la prioridad es la remoción de los escombros que dejó la explosión —ocurrida a las 9.40 del martes— "con la esperanza de encontrar a alguna (de las once personas desaparecidas) con vida".
La articulación de la ayuda a los damnificados fue oficializada luego de que la jefa del Estado arribara al helipuerto de Prefectura y se dirigiera directamente, por vía terrestre, a Salta entre Oroño y Balcarce, donde estuvo unos diez minutos. La presidenta acababa de volver de Nueva York (Estados Unidos), donde participó de la reunión del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas.
En ese sentido, el ministro de Defensa nacional, Agustín Rossi, ratificó el envío a la ciudad de "500 hombres de Gendarmería y fuerzas de seguridad, entre ellos ingenieros, para trabajar en el lugar".
Los dos detenidos por la explosión fueron indagados, pasadas las 19, en una causa por estrago culposo a cargo del juez Correccional Nº 7, Juan Carlos Curto. "Está acreditado que el gasista (Carlos García) y su ayudante (Pablo Miño) realizaban trabajos de cambio de un regulador en el edificio siniestrado", había afirmado el magistrado antes de encarar el trámite en Tribunales.
Al respecto, el portero de la construcción en la que se produjo la explosión apuntó contra el gasista detenido por el hecho al asegurar que "cometió un error grave (al cambiar el regulador de gas) y escapó".
En tanto, el gerente de relaciones institucionales de Litoral Gas (firma que también deberá rendir cuentas ante la Justicia), José María González, enfatizó: "Nadie nos notificó que se iba a hacer una tarea en el edificio".
Una de las personas desaparecidas, Omar Pais (29 años), se presentó al mediodía ante las autoridades tras permanecer en estado de shock. Estaba en la casa de un hermano. Luego, Victoria Souto reveló en su cuenta de Twitter que ingresó por error a la lista de desaparecidos y que nunca estuvo en el lugar de los hechos.
Las tareas de remoción de escombros sólo se detuvieron periódicamente para dar lugar a las ecosondas (registran sonidos para tener indicios de sobrevivientes) y a las brigadas caninas.
Pasadas las 20, una retroexcavadora de brazo largo ingresó al estacionamiento del supermercado La Gallega, desde donde retiró una losa de grandes dimensiones. Luego retornó la labor manual. Un grupo de 25 equipos de expertos en catástrofes y rescate (80 personas) viene trabajando en el lugar para hallar a desaparecidos y actualizar informes técnicos sobre la seguridad de las estructuras afectadas.
Sólo dolor. El día después del terrible estallido también profundizó la angustia de todas las personas que aguardaron en la zona conocer la suerte corrida por sus seres queridos.
En ese contexto, el jefe de los Bomberos Voluntarios de Paraná, Jorge Vallejos, admitió sobre la situación en la zona del desastre que “dan ganas de llorar”.
Según la Municipalidad, las dos torres que permanecen en pie siguen en riesgo de derrumbe (una fue apuntalada) y se estima que los evacuados podrán volver mañana a sus hogares.
En tanto, el Ministerio de Educación provincial restableció para hoy el dictado de clases en las escuelas evacuadas preventivamente que están ubicadas en el radio afectado por la explosión, excepto el Instituto Superior Federico Leloir (Salta 2045), que sufrió daños y reanudará sus actividades el lunes próximo.
Además del Centro de Especialidades Médicas Ambulatorias (Cemar, con un cupo de 50 dadores por día), los que deseen donar sangre podrán ir a los hospitales Provincial (Alem 1450), Centenario (Urquiza 3100), de Niños Víctor J. Vilela (Virasoro 1855) y Eva Perón (Granadero Baigorria).
Fuente: La Capital, FyO.