Un respiro para el mercado de granos
De no plantarse una seca en julio/agosto, sostener estas subas va a ser difícil, pero también la baja previa parece exagerada.
De no plantarse una seca en julio/agosto, sostener estas subas va a ser difícil, pero también la baja previa parece exagerada.
Primer atisbo de forjar un piso, con la excusa de excesos de humedad en EE.UU. Sin embargo, es difícil tener demasiado de algo bueno. De no plantarse una seca en julio/agosto, sostener estas subas va a ser difícil, pero también la baja previa parece exagerada.
Luego de un inicio de la semana con debilidad, el mercado de granos encontró pisos y comenzó a recuperarse. El justificativo del rebote se halló en excesos de lluvia para EE.UU. que podrían causar problemas en los cultivares de maíz y soja. Sin embargo, es difícil tener mucho de algo que en definitiva es bueno para los cultivos, como la humedad, por lo que estaríamos más bien en un rebote técnico.
La justificación más creíble para este comportamiento es que los precios habían caído mucho, los vendedores se retrajeron y los compradores vieron una oportunidad en estos niveles bajos de precio. Sin embargo, en ausencia de un problema climático concreto, que en esta época del año sería una sequía en Norteamérica, parece difícil sostener las subas para el maíz y la soja.
De todas formas, algunas señales positivas comienzan a verse. Hace unas semanas, causó temor la prohibición por parte de China de las importaciones de DDG. El DDG es un subproducto del procesamiento de maíz para extraer etanol, que se utiliza como forraje. China lo prohibió, ya que encontró en ellos trazas de un evento transgénico no aprobado en su país. Sin embargo, esta semana nos encontramos con que los permisos ya concedidos siguen siendo válidos, y que hay conversaciones avanzadas para aprobar el evento en cuestión en el país oriental. Esto implicará una demanda más importante.
Por otro lado, en la baja de precios, los productores de nuestro país, que aún retienen mucha soja, retacean sus ventas, y la falta de oferta disponible en otros países, junto con los precios más bajos que incentivan a los compradores, hace que las chances de baja se vean limitadas.
En el caso del trigo, esta semana comenzaron a verse negocios en el mercado internacional, donde EE.UU. ganó nuevamente participación, mostrando que sus cotizaciones habrían bajado lo suficiente como para estar competitivo con el resto del mundo. Además con la trilla en marcha, las lluvias que se están dando en las planicies norteamericanas generarán daños en la calidad del cereal.
Tras los buitres
Pasando al plano local, esta semana la noticia que revolucionó el mercado fue la decisión de la Corte Suprema de Justicia de EE.UU. de no tomar el caso de Argentina frente a los fondos buitre. Si bien el efecto directo sobre el comercio de granos sería limitado, lo cierto es que la incertidumbre que esto genera hace que los productores se aferren a sus granos.
El gran problema es que estamos en fechas clave para el pago de acreencias, las tasas de refinanciación están por las nubes y en muchos casos la posibilidad de seguir demorando el pago se está agotando. Esto ocurre en un momento en el que los precios están débiles, especialmente los del maíz, que sería el grano que más estarían dispuestos a vender actualmente los productores.
En tanto, la trilla de maíz vuelve a ganar momento con la maduración de lotes tardíos y de segunda, pero el problema son los excesos de humedad. La presión vendedora del maíz que va llegando al mercado impide que las mejoras del exterior se trasladen al mercado local.
El trigo, por su lado, continúa con una siembra muy lenta, fruto de los excesos de humedad.
En el centro y norte del país, ya está siendo tarde para la siembra de las variedades más buscadas por los productores, y esto podría atentar contra el incremento de área implantada que se proyectó. De todas formas, en la zona núcleo triguera del sur de Buenos Aires, el partido recién comienza, y se espera clima más seco en el corto plazo.
Fuente: Dante Romano | Ambito Financiero