Proyecciones de resultados, en el subsuelo
En el contexto actual, las proyecciones de resultados de cultivos agrícolas quedan por el subsuelo. Los cultivos más complicados son el maíz y el trigo. Se presenta la proyección de resultados para la zona Sur de Córdoba sobre la base de los precios estimados a cosecha 2015, para trigo, girasol, maíz y soja, para los cultivos realizados por administración en campo propio y bajo la forma de arrendamiento en campos de terceros.
En el contexto actual, las proyecciones de resultados de cultivos agrícolas quedan por el subsuelo. Los cultivos más complicados son el maíz y el trigo.
Se presenta la proyección de resultados para la zona Sur de Córdoba sobre la base de los precios estimados a cosecha 2015, para trigo, girasol, maíz y soja, para los cultivos realizados por administración en campo propio y bajo la forma de arrendamiento en campos de terceros.
El contexto actual de precios internacionales bajos ante una cosecha récord en EE.UU., con elevados costos de producción y comercialización, hacen que las proyecciones de resultados de cultivos agrícolas queden en el subsuelo. Los cultivos más complicados son el maíz y el trigo.
Para siembras en campo propio los resultados proyectados del cuadro muestran quebrantos para el trigo, que no se podrán revertir con los resultados de la soja de 2ª. El rinde de indiferencia necesario para cubrir los costos totales en trigo es de 49 qq/ha (inalcanzable para la zona), y en soja de 2ª de 19 qq/ha.
En el cultivo de maíz, para cubrir los costos totales se necesitan 94 qq/ha, rinde que sólo se alcanza con lluvias perfectas y una elevada inversión en fertilizantes y en semilla. Para el girasol, hace falta un rinde de 19 qq/ha para cubrir costos totales y en soja de 1ª se necesitan 27 qq/ha. En el rango alto de rindes, ambos cultivos proyectan resultados positivos.
Para siembras en campo arrendado y para los precios y costos que se muestran en el cuadro, los rindes de indiferencia se ubican en 57 qq/ha para trigo, 22 qq/ha para soja de 2ª, 100 qq/ha para maíz, 22 qq/ha para girasol, y 32,2 qq/ha para soja de 1ª.
Impacta la magnitud de los quebrantos proyectados en trigo y en maíz, que explican la importante caída proyectada en el área de siembra de maíz. En campo arrendado sólo es posible apuntar a salir hecho con el cultivo de soja. En el agro, los resultados dependen del precio y del rinde. En cuanto al rinde, el productor entierra la inversión y cuida del cultivo, pero todo el resto depende del clima. En cuanto al precio, no lo maneja el productor, ya que se trata de commodities.
En el contexto actual, de precios de los granos por el subsuelo, sólo la eliminación de las retenciones a las exportaciones en los cereales podría ayudar a mitigar los quebrantos. La reciente rebaja en las alícuotas de las retenciones a las exportaciones de petróleo ante la baja en el precio internacional del crudo es una señal positiva en ese sentido.
Fuente: Márgenes Agropecuarios