BCRA duplica la ayuda al Tesoro en 2015 para cubrir déficit fiscal
El Gobierno debió duplicar la ayuda que recibe del Banco Central, en lo poco que va del año, para poder cubrir su rojo financiero: el Tesoro se vio obligado en el comienzo de este año a tomar la mayor parte de las utilidades que mantenía depositadas en el organismo (limitado ahora por la cantidad de adelantos transitorios que puede recibir por ley de la entidad) y darle mayor velocidad a una emisión de pesos en la economía que nutre la demanda de dólares y le pone un piso al dólar "blue".
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El Gobierno debió duplicar la ayuda que recibe del Banco Central, en lo poco que va del año, para poder cubrir su rojo financiero: el Tesoro se vio obligado en el comienzo de este año a tomar la mayor parte de las utilidades que mantenía depositadas en el organismo (limitado ahora por la cantidad de adelantos transitorios que puede recibir por ley de la entidad) y darle mayor velocidad a una emisión de pesos en la economía que nutre la demanda de dólares y le pone un piso al dólar "blue". El organismo giró $ 14.158 millones al sector público este año; un 95% más que lo que había transferido en el mismo período del año pasado ($ 7.233 millones).
El fisco vuelve a ser, de este modo, el factor principal que está detrás de la fuerte expansión de liquidez que hace Alejandro Vanoli. El Tesoro resolvió retirar una buena parte de los pesos que tenía depositados en el organismo por utilidades que fueron giradas durante el año pasado (aprobadas en el balance de 2013). "A fin de diciembre tenía $ 15.000 millones en moneda nacional y unos u$s 1.100 millones en moneda extranjera; pero durante enero se registró una caída en el stock que lo dejó prácticamente con todo en pesos. A partir de entonces, se observa una nueva reducción, de unos $ 9.100 millones, que claramente está representada por pesos que finalmente tienen impacto en la base monetaria", comentó a este diario el economista Andrés Méndez, de AMF Economía.
Por este fenómeno, el ritmo de emisión de pesos se disparó y se acercó al 30% anual. Y amenaza ahora con multiplicar, simultáneamente, los esfuerzos que debe hacer Vanoli para mantener bajo control la liquidez del sistema y moderar las presiones cambiarias, en un momento en que el mercado también observa con atención el aumento de los pasivos del Central y el deterioro de su patrimonio. El año pasado, el BCRA debió emitir $ 94.600 millones en Lebac para reabsorber una emisión de pesos que se desbordó y llegó a los $ 161.500 millones para financiar al Tesoro (un 73% más que el año anterior). Si las necesidades fiscales persisten, el Central se verá obligado a aumentar aún más el stock de su deuda.
"Quizás, con esta relajación de la política monetaria, el Gobierno pretenda generar impulsos reactivantes en una economía que no logra escapar de la recesión. Pero, una vez más, se equivoca: el abandono de la astringencia monetaria no proveerá estímulos al nivel de actividad, sino que se canalizará a mayor inflación y brecha cambiaria", advirtió el economista Federico Muñoz. "Si quisieran dinamizar la economía, la alternativa más eficaz sería -precisamente- recurrir al crédito externo para conseguir dólares que alivien al cepo importador. De todos modos, a esta altura de los acontecimientos, ya no debiéramos sorprendernos cuando Kicillof insiste, una y otra vez, en conducir la política económica por el camino del error sistemático", completó.
Fuente: Ambito Financiero