Industriales lácteos piden “máxima comprensión”
El Centro de Industria Lechera (CIL) solicitó “al resto de la cadena láctea, y a los consumidores en particular, la máxima comprensión” ante las inundaciones que produjeron una caída significativa de la producción de leche.

El Centro de Industria Lechera (CIL) solicitó “al resto de la cadena láctea, y a los consumidores en particular, la máxima comprensión” ante las inundaciones que produjeron una caída significativa de la producción de leche.
Las autoridades de CIL –por medio de un comunicado difundido hoy– indicaron que “las primeras estimaciones (de producción de leche) a nivel nacional, que seguramente se corregirán a la baja cuando cierre el mes, arrojan para abril caídas del orden del 15% frente al mes anterior y de entre 20% y 25% versus abril de 2015. En Santa Fe, Córdoba y Entre Ríos estas mermas son muy superiores”.
“La producción primaria, sin dudas el eslabón que sufre con mayor crudeza el impacto devastador de este desastre climático, se debate en muchos casos entre la continuidad o el cierre de tambos. Aquellos que logren resistir verán menguada su capacidad productiva, no sólo para lo que resta del año, sino también para el venidero. En esta coyuntura crítica, en que las relaciones de oferta y demanda cambiaron drásticamente, la industria láctea buscará por todos los medios una sensible mejora del precio al productor de leche, tan necesaria como urgente dados los motivos ya expuestos en los párrafos precedentes”, añadió el comunicado.
La realidad es que, en las últimas semanas, las industrias lácteas –especialmente aquellas localizadas en el norte de la zona pampeana– volvieron a competir fuerte por un recurso que, debido al desastre climático, se transformó en escaso.
Esta nueva situación (“en que las relaciones de oferta y demanda cambiaron drásticamente” sin considerar aún las paritarias en negociación con Atilra) se presenta en una coyuntura en la cual las cadenas de supermercados tienen, en términos relativos, un margen extraordinario en la composición del precio final de los principales productos lácteos.
La participación promedio de los supermercados en el precio –por ejemplo– de los quesos comercializados en el mercado interno fue en el trimestre diciembre 2015/febrero 2016 de 34,5% versus 23,6% y 24,8% por parte de la industria y los tamberos respectivamente, según datos del Instituto Argentino de Profesores Universitarios de Costos (Iapuco).
Semejante marcación de precios hace que actualmente sea más barato organizar un asado con los cortes más caros que una picada con quesos (en Disco el Reggianito La Serenísima, por ejemplo, se comercializa a un precio de 290 $/kg versus 230 $/kg un lomo de novillito).
Fuente: Valor Soja