El año arrancó con un desastre climático en la cuenca santafesina luego de que la producción nacional de leche cerrara el 2016 con una baja del 13%
La cuenca tambera de la zona central de Santa Fe volvió a registrar en menos de un año un desastre climático generalizado provocado por precipitaciones excesivas que impiden o dificultan la producción y entrega de leche.

La nueva fase de inundaciones en la principal cuenca tambera santafesina se presenta en un mal momento: la producción nacional de leche en 2016 habría registrado una baja del 13,3% respecto de 2015, según estimaciones del consultor lácteo Marcos Snyder (no se publicaron aún datos oficiales actualizados al respecto).
Desde el 16 de diciembre pasado a la fecha las localidades de Sunchales y Labordeboy recibieron un acumulado de 490 y 419 milímetros. “Lamentablemente el panorama puede agravarse. El alerta por nuevas descargas en las próximas horas pone en vilo a las cinco provincias de la región central del país”, indica un informe difundido hoy por la Bolsa de Comercio de Rosario.
La baja de la producción lechera generada por las inundaciones ocurridas en abril del año pasado en las cuencas tamberas de Entre Ríos, Santa Fe y Córdoba obligaron por entonces a las industrias lácteas a recomponer los precios pagados a los tamberos. Y ese ajuste fue posteriormente trasladado a los consumidores.
Entre abril y noviembre de 2016, según los últimos datos publicados por el Indec, la canasta de productos lácteos básicos en la ciudad de Buenos Aires registró un aumento promedio de precios de 25,9%, mientras que las canastas farináceas y cárnicas bovina, por ejemplo, subieron 13,1% y 10,8% en ese mismo período respectivamente.
Además, a mediados del año pasado, debido al desastre climático, las principales industrias lácteas locales comenzaron a implementar planes de racionamiento de leche para destinar el insumo a la elaboración de algunos productos en desmedro de otros. Eso generó desabastecimientos temporales de crema y manteca en muchas de las principales ciudades argentinas.
“En los seis departamentos (santafesinos) damnificados, con Castellanos a la cabeza, sobre 3500 tambos que hay en la zona, 869 fueron afectados, con una estimación de pérdida de 1,50 millones de litros de leche/día, que llevado a los próximos 30 días, que es el cálculo mínimo que analizamos como de afectación segura, estamos hablando de una pérdida de 45 millones de litros de leche/día”, indicó hoy lunes el ministro de la Producción de Santa Fe, Luis Contigiani, durante una reunión de la Junta Provincial de Protección Civil convocada para evaluar el estado de situación.