Resucitaron las ventas de sembradoras luego de apagón K: pero aún siguen lejos de la demanda potencial del campo
En el año 2016 se vendieron en el mercado argentino 2017 sembradoras, una cifra 81% y 37% superior a la registrada en 2015 y 2014 respectivamente. Sin embargo, las ventas no lograron superar las 2325 y 2313 unidades comercializadas en 2012 y 2013.

En el año 2016 se vendieron en el mercado argentino 2017 sembradoras, una cifra 81% y 37% superior a la registrada en 2015 y 2014 respectivamente. Sin embargo, las ventas no lograron superar las 2325 y 2313 unidades comercializadas en 2012 y 2013.
La venta de sembradoras es uno de los mejores indicadores para evaluar la evolución de la capacidad de pago de las empresas agrícolas porque se trata de un bien que, por sus características, no es útil como reserva de valor (y por ende no es viable como “cobertura cambiaria”).
La época de oro para el sector se registró entre 2003 y 2011. Por entonces la capacidad de compra promedio de los productores fue muy alta de la mano de precios internacionales récord de los granos (la única excepción fue la caída severa de ventas registrada en 2009 como producto de los quebrantos generalizados registrados en el ciclo 2008/09 por una sequía histórica).
Pero a partir de 2012 el auge agrícola se interrumpió por la caída del valor internacional de los commodities combinada con una alta presión tributaria y atraso cambiario (ver gráfico). Uno de esos factores –la presión impositiva– fue parcialmente corregido por el gobierno macrista (el Índice Fada, que llegó a estar en 94% en septiembre de 2015, descendió a 63% en diciembre de 2016).
Otro dato. El registro más elevado de ventas de sembradoras en los últimos quince años corresponde al 2003 con 4834 unidades vendidas en un ciclo (2003/04) en el cual el área agrícola argentina (sumando los cultivos de soja, maíz, trigo, girasol, sorgo y cebada) fue de 26,3 M/ha. El año pasado las ventas internas de sembradoras fueron de poco más de 2000 unidades con un área agrícola estimada por la Bolsa de Cereales de Buenos Aires en 32,5 M/ha.
El año pasado además –según datos del Indec– creció un 226% y 191% la venta interna de tractores y cosechadoras de la mano de una recuperación de la demanda de unidades importadas (que en 2015 prácticamente no se podían ingresar al país por el cepo cambiario instrumentado por el kirchnerismo). En ese marco, las ventas de tractores y cosechadoras ensamblados en el país crecieron en 2016 un 9% y 29% respecto de 2015.
Fuente: Valor Soja