CAYÓ 2% LA SOJA Y NO HUBO VENTAS.
La baja en la oleaginosa disponible se relacionó con las mermas con las que operó durante toda la jornada el mercado de Chicago, de referencia obligada para la soja. Allí, influenciados los inversores por los pronósticos de mejoras climáticas para esta semana en las áreas productivas de EE.UU., el contrato a agosto perdió 2%, hasta u$s 367 la tonelada, mientras la posición noviembre -correspondiente a la nueva cosecha- terminó en u$s 357 por la misma cantidad.
La soja en Rosario quebró ayer la carrera alcista, que la había depositado el viernes a las puertas de $ 1.000 la tonelada, y tras retroceder 2% cerró a $ 960 los mil kilogramos, lo que generó escaso interés de los productores por deshacerse de la mercadería.
La baja en la oleaginosa disponible se relacionó con las mermas con las que operó durante toda la jornada el mercado de Chicago, de referencia obligada para la soja. Allí, influenciados los inversores por los pronósticos de mejoras climáticas para esta semana en las áreas productivas de EE.UU., el contrato a agosto perdió 2%, hasta u$s 367 la tonelada, mientras la posición noviembre -correspondiente a la nueva cosecha- terminó en u$s 357 por la misma cantidad.
Con ese panorama bajista, las fábricas que operan en el Gran Rosario disminuyeron en $ 20 sus ofertas respecto de las del último viernes, cuando habían ofrecido $ 980 la tonelada en el recinto, y hubo negocios por afuera que se cerraron en torno a $ 1.000, el piso esperado por los productores para liquidar un volumen aceptable de la soja que, en tanto, se guarda en silobolsas.
El resto de los compradores habituales prefirió no realizar ofertas por la soja, a la espera de lo que suceda en los próximos días en el mercado internacional antes de hacer algún nuevo movimiento alcista. Es que consideran que la estrategia de los productores de esperar un mejor precio antes de desprenderse de la soja parece no tener fin. Explican que si en el recinto se llega a pagar $ 1.000 la tonelada, tal vez aparezca un buen volumen, aunque lejos de las 100.000 toneladas negociadas a principios de junio, a $ 900. Sostienen que, con menos del 40% de la supercosecha sojera en manos de la producción (el resto se fue vendiendo a cuentagotas), si se cruza la barrera de los $ 1.000, de inmediato los sojeros querrán más.
Fuente: El Cronista, Cuenca Rural.