PRONOSTICAN CIERRE DEL 30% DE LOS FEED LOTS Y LA RECONVERSIÓN DEL NEGOCIO.
Especialistas reunidos en agrotendencias 2009 advierten que la inminente caída de los subsidios del Gobierno que sostenían a los engordadores a corral servirá para limpiar el mercado de los advenedizos. ¿Que harán los frigoríficos?
El negocio de los feed lots se encamina hacia un proceso de reconversión a raíz de la fuerte reducción, y hasta posible eliminación, de los subsidios del gobierno, hoy en el centro de la opinión pública por los casos de reparto corrupto de esos fondos.
El tema es que tal como está armado hoy el negocio, sin esa ayuda los números no cierran y el ajuste se traducirá en el cierre de algunos establecimientos. Y de ese proceso de depuración del mercado que puede durar varios meses, y que además significará la reaparición de los engordadores a campo, sólo podrán emerger los feed lots más profesionalizados y, sobre todo, los que pertenezcan a frigoríficos o cadenas comerciales que puedan compensar las pérdidas con un aumento de precio de venta al público.
Ese es el escenario que trazó ayer el analista especializado en mercado de carnes, Víctor Tonelli, en su disertación en Agrotendencias 2009, la jornada organizada por la Federación de Entidades Acopiadoras en la Bolsa de Cereales de Buenos Aires.
¿Por qué se acaban los subsidios a feed lots?, le preguntó punto biz
Yo veo que los subsidios tal como los conocemos hoy tocaron fin. No quiero decir que el gobierno no vaya a pagar mas nada ni cancele en algún momento la deuda. Lo que está mostrando la inmensa deuda que acumula el Estado, y que ronda los $1.100 M en los últimos 9 meses, es que ya no hay caja para financiar a los feedlots con subsidios que, además, causaron una gran distorsión a la cadena. También quedó demostrado que su asignación es un descontrol y una enorme fuente de corrupción.
¿Qué harán los feed lots?
Sin subsidios, van desensillar un par de meses y apretar los dientes hasta que finalmente la suba de precios compense los subsidios no recibidos. Hoy, representan el equivalente a entre $0.70 y $1 por el kilo vivo, y como los precios podrían subir entre $0.80 y $1, los feed lots en el futuro volverán a operar no ya sobre la base de un subsidio que reduce, en teoría, costos de producción, sino de un precio genuino que les eleva el valor de venta.
¿Y por que tiene que subir el precio?
Porque la caída de la oferta será enorme, en torno a los 13 a 15 kilos por habitante por año. Y con demanda interna y externa firme, el único que puede arbitrar entre caída de oferta y demanda es el precio. A partir de noviembre, que será un punto de inflexión, y durante un año será inevitable que suban los precios.
¿Y podrán aguantar los feed lots a que llegue esa suba de precios?
No todo. Es posible que haya una depuración de operadores. Cuando se terminen los subsidios, que fueron un atractivo para algunas empresas que vieron oportunidad de captura renta vía subsidios, van a quedar sólo los buenos, que son bastantes y muy profesionales. Puede que ocurra como los videoclubs, que fueron una moda en los 80 atrayendo gente al negocio que, cuando se achicó la torta, se tuvo que retirar. De los 1.700 feed lots que hay inscriptos, unos 1.200 iniciaron carpetas por subsidios y de ellos habrán cobrado cerca de 900. Yo estimo que no más del 30% de esos 900 son los que quedan muy complicados.
La cámara de feedloteros advierte que sin subsidios caerá el precio al criador.
Para nada. Todo lo contrario. Cuando caiga la oferta, y el precio vuelva a tirar para adelante, van a volver a operar los 100 mil invernadores que quedaron fuera por esta competencia inequitativa. Van a quedar los buenos feedloteros, que llegaron para quedarse porque es una buena herramienta, y va a volver el invernador tradicional, logando así un sistema de engorde más equilibrado y no solo basado en el feed lot, que hoy representa el 40 de lo que va a faena.
¿Estamos, entonces, ante un nuevo cambio en el negocio del engorde? Va a haber un poco de todo. Si hoy los feedlots disparan 550 600 mil cabezas por mes, a lo mejor esto baja a 400 mil y los otros lo van a pasar por la recuperación de la actividad de los invernadotes tradicionales. Los buenos van a seguir estando, llegaron para quedarse y es una muy buena herramienta.
Los feedloteros advierten también que sin subsidios faltará carne para consumo.
La oferta se reducirá y el precio subirá pero no por la quita de subsidios. Es la suma de factores como el desplazamiento de la ganadería a zonas más improductivas (por cada 100 vacas que se van de la zona pampeana hay 21 terneros menos), la mala administración desde hace varios años de las políticas que desvirtuaron la cadena y quitaron incentivos, por ejemplo con estos subsidios, y la seca que eliminó muchas cabezas.
Fuente: Mariano Galíndez, Punto Biz.