Minimizando impactos: manejo del nivel de napas en zonas de llanura
Durante el desarrollo del Taller sobre Manejo de Napas, que se realizó en la Sala CQ3 Atectra BV, el ingeniero Civil Pablo García diserto sobre los principales puntos de esta temática. Allí, García hizo hincapié sobre el manejo del uso de suelo como estrategia fundamental.

Durante el desarrollo del Taller sobre Manejo de Napas, que se realizó en la Sala CQ3 Atectra BV, el ingeniero Civil Pablo García diserto sobre los principales puntos de esta temática. Allí, García hizo hincapié sobre el manejo del uso de suelo como estrategia fundamental.
“Según la variabilidad climática el manejo puede ser más óptimo o no, por lo tanto para climas medios o secos la conducción en el uso de suelo influye y puede formar parte de la estrategia. Como contrapartida, en los climas húmedos la eficacia de manejo de uso de suelo disminuye” remarcó.
El especialista, destacó que el uso del suelo puede explicar el 50 % del cambio en las napas, aunque las precipitaciones son responsables del 90% de las variables. “Estos procesos no son lineales por eso arrojan estos porcentajes”.
En este contexto más empírico pesan más las precipitaciones que el manejo del uso del suelo para explicar las variantes y el crecimiento de napas.
Las bases de datos sobre el uso de suelo se pueden encontrar en escala departamental, pero actualmente faltan registros para abarcar todas las zonas del país. Cabe destacar que una buena base es la que provee el ministerio de agroindustria.
Durante varios años la realización de prácticas no tenía en cuenta este tipo de problemáticas que son sumamente nuevas para el productor. Por este motivo la planificación y la implementación de rotaciones es muy importante en la actualidad. Transitar un período húmedo pone de manifiesto muchos problemas que anteriormente no existían.
El exceso de agua, es una materia prima muy importante para el productor agropecuario, pero la retención de agua implica, de acuerdo al tipo de zona, áreas muy grandes para contenerla y la vez un costo muy elevado lo que no hace viable esta tarea.
La solución requiere de políticas de uso de suelo que determinen la rotación de cultivos para que este obtenga una mayor capacidad de absorción, obras de infraestructura y sistema de alerta en las zonas más urbanas.
“Las obras hidráulicas son importantes pero sirven para gestionar las inundaciones, actualmente estamos trabajando a nivel campo promoviendo no solo obras sino también buenas prácticas agrícolas”, concluyó, Pedro García.
Fuente: String Agro